Irán declaró que la reanudación de las negociaciones nucleares con los Estados Unidos, tras los recientes ataques con misiles del ejército israelí, ha perdido sentido
Esto vuelve a subrayar la creciente tensión en la región y dificulta la búsqueda de un compromiso diplomático entre las partes, según las autoridades en Teherán. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Esmáíl Baghaéi, en una entrevista con la agencia Bloomberg, calificó las perspectivas de reanudación de las negociaciones en la ciudad de Mascate, Omán, programadas para el domingo 15 de junio, como muy dudosas. No expresó una negación directa a su cancelación, pero sugirió que las acciones de "la otra parte" han hecho que el proceso de diálogo sea una pérdida de tiempo inútil. Según Baghaéi, "la otra parte ha hecho lo que hace que cualquier diálogo sea absurdo". El contexto de la situación se agrava ante incidentes militares graves. La noche del 13 de junio estuvo marcada por un ataque de las fuerzas israelíes a objetivos en Irán relacionados con el programa nuclear. La Tel Aviv oficial justificó esta acción como una medida preventiva — un intento de impedir que Irán obtenga armas nucleares. Menos de 24 horas después, en respuesta, las fuerzas militares iraníes lanzaron misiles contra posiciones israelíes, lo que representó una escalada más en el conflicto regional. La comunidad internacional hace un llamado a la moderación y a una resolución diplomática entre Irán e Israel. Los representantes de la Unión Europea, en particular Francia, subrayaron la importancia de encontrar una solución pacífica y de evitar una escalada de la violencia. Al mismo tiempo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reaccionando a los acontecimientos recientes, instó a Irán a volver al acuerdo nuclear de manera conciliadora, destacando que es necesario actuar con rapidez, de lo contrario las consecuencias podrían ser irreparables. Por el momento, la situación mantiene abierta la cuestión de una posible escalada mayor o la búsqueda de vías diplomáticas. Sin embargo, la misma tensión en la región demuestra que ninguno de los actores desea bajar la guardia en este juego muy delicado y peligroso. Continúan los esfuerzos diplomáticos, pero los avances reales parecen inalcanzables por ahora, en medio de una escalada militar seria y declaraciones políticas acerbas.