En Chernígovshchyna ha ocurrido nuevamente un evento trágico que nos recuerda una vez más la agresión y los riesgos que los conflictos militares representan para los civiles en la región
En la noche del 12 de junio, una aldea fronteriza en el distrito de Novhorod-Siverskyi fue objetivo de un nuevo ataque por parte de las fuerzas rusas, que emplearon un dron de tipo FPV. Como resultado de este ataque, murió un civil local, un hombre de 46 años residente en ese lugar. Según Vyacheslav Chaus, jefe de la Administración Militar Regional de Chernígov, los rusos decidieron atacar justo esa noche, enviando un dron hostil que apuntó deliberadamente a las afueras rurales. Este ataque fue devastador y representó una noticia alarmante para la población local, ya que en situaciones así los civiles suelen estar en la zona de riesgo. Se sabe que durante el ataque resultó herido el residente actual de la aldea, cuyo vida se extinguió debido a las lesiones recibidas. Actualmente, los familiares de la víctima expresan profundas condolencias y apoyo. No es la primera tragedia en los últimos días en la región, ya que solo unas horas antes, el 12 de junio, en Chernígovshchyna ocurrió otra situación peligrosa. Dos adolescentes de 12 años que treparon a la azotea de un vagón de tren de carga en busca de aventuras recibieron una descarga eléctrica. Como resultado, los niños fueron trasladados a centros médicos con heridas graves. Estos eventos vuelven a destacar el alto nivel de peligro para los habitantes locales, especialmente en medio de la agresión continua. En general, estos incidentes trágicos subrayan el alto nivel de tensión e inestabilidad en la región, así como el peligro directo que enfrentan los civiles cada día. Las autoridades continúan asegurando que toman todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de la población, aunque por ahora no hay garantías de nuevos ataques, y los residentes de Chernígovshchyna deben enfrentarse una y otra vez a la dura realidad de la guerra y sus consecuencias.