El presidente de Estonia, Alar Karis, hizo un llamado a un enfoque prudente y de largo plazo respecto a la posible adhesión de Ucrania a la OTAN, subrayando que la perspectiva de la integración de Kiev en la alianza es completamente realista en el futuro, independientemente de las dificultades políticas actuales y de las declaraciones ambiguas en la arena internacional
En una entrevista a la cadena lituana LRT, Karis destacó que es importante no desesperarse por la falta de voluntad política unánime entre los aliados en este momento. En particular, le preguntaron sobre la probabilidad de que Ucrania se convierta en miembro de la OTAN, teniendo en cuenta que en Estados Unidos, uno de los actores principales en este sistema, actualmente existe una indecisión, expresada, entre otros, por el expresidente Donald Trump, acerca de la posibilidad de que Kiev se uniera a la alianza. "Recuerden que en Estonia empezamos a considerar la adhesión a la OTAN en tiempos en que nuestras tierras estaban militarizadas por tropas rusas, y no todos creían que Estonia, Letonia y Lituania alguna vez serían miembros plenos de la alianza. Pero hoy en día, eso es una realidad. Somos miembros de la OTAN y aliados activos", subrayó el presidente Karis. Señaló además que Finlandia y Suecia, tras completar un largo período de neutralidad, se unieron recientemente a la OTAN, reafirmando aún más su compromiso con la comunidad de seguridad. Karis agregó que Ucrania también necesita garantías de seguridad. A su juicio, el futuro a largo plazo del país en el sistema de defensa colectiva es completamente posible. "Estamos convencidos de que Ucrania, al final, será miembro de la OTAN. Es cuestión de tiempo y de esfuerzos conjuntos", resaltó el líder estonio. El próximo año, Estonia planea aumentar significativamente su gasto en defensa, destinando más del 5% del Producto Interno Bruto a este sector, en línea con las recomendaciones de la OTAN. El ministro de Defensa de Estonia, Hanno Pefkurus, expresó su confianza en que para los países miembros de la alianza sea totalmente factible alcanzar el objetivo de gastar el 2% (y hasta el 5%) del PIB en defensa en un plazo de cinco años. Este rumbo demuestra la intención de Estonia de fortalecer su capacidad defensiva frente a los desafíos actuales. La cuestión final sobre el futuro de Ucrania en la OTAN y la política del bloque en general, incluyendo la cantidad y naturaleza de las garantías de seguridad que se le otorgarán a Ucrania, sigue siendo uno de los temas clave en la agenda de la política internacional. Muchos expertos y analistas señalan que, pese a la situación difícil actual, las perspectivas a largo plazo de la integración de Ucrania en la OTAN son completamente realistas, especialmente considerando el avance gradual de los países de Europa del Este hacia un incremento en la cooperación y el fortalecimiento de las alianzas de defensa. En este contexto, también resulta importante recordar la próxima cumbre de la OTAN en La Haya, donde no solo se discutirán cuestiones de apoyo en materia de seguridad a Ucrania, sino también compromisos y decisiones estratégicas que afectarán el futuro de la alianza y, directamente, la seguridad de la región en su conjunto.