Los militares rusos han vuelto a lanzar intensivos ataques en la región de Dnipropetrovsk, utilizando drones y artillería, lo que ha provocado graves consecuencias para los residentes civiles y la infraestructura de la zona
Según los últimos informes, durante el domingo se registraron ataques activos en varias áreas de la región, resultando en heridas leves y graves para dos personas, además de daños en decenas de edificios y vehículos. Según Sergey Lysak, jefe de la Administración Militar de Dnipropetrovsk, las fuerzas ocupantes atacaron deliberadamente las regiones de Nikopol y Synelnykove. En particular, en Nikopol, los rusos usaron drones FPV (drones de corto alcance capaces de transportar explosivos), artillería pesada y municiones lanzadas desde aeronaves no tripuladas. Como resultado de estos ataques, dos residentes locales resultaron heridos en Nikopol. Uno de ellos se encuentra en estado grave y requiere asistencia médica urgente. Fuentes informan que durante la ofensiva se dañó una vivienda privada, así como seis automóviles, una construcción agrícola y otros bienes. Además, uno de los edificios fue completamente destruido por el fuego. En todo el área también resultaron afectadas la infraestructura y el sector privado debido a las acciones enemigas. Los ataques alcanzaron asimismo las comunidades vecinas de Pokrovsk y Mezhiv. Dentro de la comunidad de Mezhiv, los drones rusos causaron daños significativos a viviendas privadas y objetos de producción. Según información actualizada, durante la noche, los ocupantes lanzaron un ataque contra una de las empresas, provocando daños importantes en las instalaciones y dañando la propiedad de los vecinos. Como resultado de estos ataques, hay heridos, incluidos civiles; la situación sigue siendo tensa, y las autoridades locales llaman una vez más a la población a tener la máxima precaución y a seguir las reglas de seguridad. Los bombardeos en la región continúan desde hace varios días, lo que confirma una vez más la sistematicidad y el carácter cínico de la agresión por parte de Rusia hacia Dnipropetrovsk. Los habitantes locales, a pesar de los constantes ataques, muestran resistencia y paciencia, con la esperanza de que cesen pronto los combates militares y se restablezca la paz en sus hogares. Las autoridades regionales llaman a mantener la preparación reforzada y continúan en modo de alerta las 24 horas, ya que la amenaza no desaparece y los ataques periódicos subrayan la necesidad de una defensa fortalecida y del apoyo estatal a los civiles.