Las fuerzas rusas otra vez atacaron a la población civil de Donetsk, lanzando un ataque contra las viviendas en la localidad de Rodianske
Como resultado de un ataque aéreo con una bomba tipo "FAB-250" el miércoles, varias personas inocentes resultaron heridas, y las viviendas y la infraestructura fueron dañadas. Este incidente vuelve a poner de manifiesto la magnitud y el cinismo de los crímenes de guerra que Rusia comete sistemáticamente contra la población civil en el este de Ucrania. Según la información publicada por la Fiscalía de la región de Donetsk el viernes en su página oficial de Facebook, los militantes utilizaron una bomba aérea "FAB-250" desde lanzaderas UMPK en un ataque dirigido a las zonas residenciales de Rodianske. Como resultado del incidente, cuatro residentes locales sufrieron heridas graves, incluyendo a tres mujeres de 56, 67 y 84 años y un hombre de 66 años. La fuente indica que a las víctimas se les diagnosticaron múltiples heridas por fragmentación, fracturas, así como lesiones por minas y explosivos. Las víctimas fueron urgentemente trasladadas a centros médicos para recibir la atención necesaria. Al mismo tiempo, los fragmentos y los cristales rotos se extendieron a cuatro edificios de apartamentos y seis cocheras cercanas, causando daños considerables y creando una amenaza adicional para los habitantes locales. Las autoridades comenzaron una investigación criminal por el crimen de guerra, un ataque deliberado contra la población civil, lo cual es una grave violación del derecho humanitario internacional. La investigación continúa, los expertos documentan la escala del delito y determinan a todos los responsables de la organización y ejecución de este ataque. En general, este incidente en Rodianske confirma una vez más la crueldad y la implacabilidad de las fuerzas militares rusas en la guerra contra Ucrania. Los habitantes y comunidades de Donetsk deben sobrevivir a los nuevos desafíos que se presentan cada día, y la comunidad internacional hace un llamado a una respuesta más activa y a la rendición de cuentas de los responsables de crímenes de lesa humanidad.