Gran Bretaña ha anunciado una inversión significativa en ayuda militar a Ucrania, especialmente en el ámbito de las tecnologías no tripuladas
Este año, el país planea invertir un récord de 350 millones de libras esterlinas (aproximadamente 472 millones de dólares americanos) para aumentar sustancialmente el suministro de drones a las Fuerzas Armadas de Ucrania. Esto evidencia un nuevo nivel de apoyo a Kyiv en el campo de las tecnologías militares y la inteligencia estratégica, así como una creciente confianza de los expertos militares británicos en la eficacia de la táctica con drones en el combate moderno. Según el Ministerio de Defensa del Reino Unido, en 2023 el país ya ha suministrado a las fuerzas armadas ucranianas más de 10 mil dispositivos no tripulados, y el actual año financiero tiene metas aún más ambiciosas. Este récord no es solo un número, sino un vínculo importante en el amplio apoyo que el Reino Unido brinda a Ucrania, que ya se ha convertido en uno de sus principales prioridades en ayuda militar. Dentro del presupuesto de este año, se planea entregar al menos 100 mil drones en 2025, casi diez veces más que el nivel del año pasado. Estas enormes inversiones en drones forman parte de un programa más amplio de ayuda militar del Reino Unido a Ucrania que supera los 4.500 millones de libras esterlinas, y que contempla no solo equipamiento técnico, sino también apoyo en entrenamiento de personal y en la mejora de los sistemas de defensa. En el Ministerio de Defensa resaltan que los militares ucranianos han demostrado una gran eficacia en el uso de drones en el campo de batalla, lo que se convirtió en uno de los principales motivos para duplicar la inversión británica en este sector. Se destaca además que las empresas de defensa británicas, incluidas las pequeñas y medianas, están activamente involucradas en la producción de dicha tecnología. Además del paquete principal de apoyo, en la reunión de hoy del Grupo de Contacto sobre Defensa de Ucrania (en formato “Ramstein”), el ministro de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, anunciará un apoyo financiero adicional de 247 millones de libras esterlinas. Estos fondos se destinarán a la formación de militares ucranianos en el marco del programa Interflex, así como a la adquisición de equipos y materiales para la capacitación del personal. Asimismo, el lado británico ha confirmado que desde principios de 2025 se han entregado ya 140 mil proyectiles de artillería para Ucrania, en uno de los mayores suministros en la ayuda moderna, fortaleciendo significativamente las posiciones ucranianas en el frente. Para continuar con la capacitación del personal militar y proporcionarles el equipamiento y la tecnología necesarios, Reino Unido destinará otros 40 millones de libras esterlinas a un fondo específico de la misión de la OTAN para apoyar a Ucrania — NSATU. Esto permitirá optimizar la cooperación y acelerar la preparación del ejército ucraniano. En resumen, esta estrategia de apoyo por parte del Reino Unido es una continuación lógica de su política de asociación militar activa y a largo plazo con Ucrania. La decisión se tomó después de que en marzo de 2023 se lanzara la primera iniciativa a gran escala de la “coalición de drones”, con la asignación de 20 millones de euros para la compra de drones de reconocimiento táctico para Ucrania. Recientemente también se informó que Noruega acordó destinar una mayor parte de sus recursos financieros para apoyar la producción ucraniana de drones, usando fondos estatales existentes. Esto refleja cómo la comunidad internacional cada vez más enfoca sus esfuerzos en desarrollar las capacidades propias de Ucrania en tecnologías no tripuladas, un elemento clave en su estrategia de disuasión y defensa. Estas inversiones a gran escala y programas diversos resaltan la tendencia a intensificar la ayuda militar internacional a Ucrania en este período convulso de su historia. Es evidente que en los próximos meses, los esfuerzos del Reino Unido no solo se dirigirán a dotar técnicamente a las fuerzas armadas ucranianas, sino también a fortalecer sus capacidades defensivas en general. Esto otorga un nuevo impulso potente a los procesos de modernización del ejército ucraniano y a su aspiración de independencia en sus propios recursos de defensa, especialmente relevante en el contexto de los desafíos de seguridad internacional sin precedentes actuales.