En Jersón, en las últimas 24 horas, un dron ruso se llevó la vida de un residente local, confirmando una vez más la magnitud y la crueldad de la guerra actual

Según informa el jefe de la Administración Militar Regional de Jersón, Oleksandr Prokudin, en su canal oficial de Telegram, la tragedia ocurrió en el distrito de Dnípro, debido a un ataque de un dron kamikaze. Según el funcionario, un hombre de 49 años, que se encontraba en su sector privado, recibió heridas mortales como resultado de la caída de un dispositivo explosivo desde un vehículo aéreo no tripulado. Se sabe que los fragmentos y la onda expansiva del dron causaron daños fatales, que ya no pudo superar. El jefe de la Administración expresó sus condolencias a los familiares y seres queridos de la víctima, destacando la inusual brutalidad y cinismo de la táctica de terror moderna de Rusia. En total, durante las últimas 24 horas, la situación en la región permaneció tensa. Las fuerzas enemigas atacaron de forma dirigida la infraestructura social, el sector residencial y los objetos de infraestructura crítica de la región. Según información oficial, estuvieron bajo fuego 34 asentamientos. Los bombardeos enemigos afectaron barrios residenciales: se dañaron tres edificios de varios pisos y diez viviendas privadas. Además, se destruyeron gasoductos y un puesto de base de atención médica de emergencia. Como resultado de los combates, ocho personas resultaron heridas de diferentes grados de gravedad. En general, la situación en la región de Jersón sigue siendo extremadamente complicada. Las acciones del enemigo no cesan: la población civil se ve obligada a vivir constantemente en un asedio de miedo y destrucción. Las autoridades locales instan a no ignorar las recomendaciones de seguridad, ya que el peligro continúa y cada nuevo bombardeo representa una amenaza real para la vida y la salud de los habitantes. Esta situación vuelve a subrayar la necesidad de brindar apoyo internacional y fortalecer las medidas de defensa en la región para proteger su tierra y a su gente de la agresión despiadada.