Reino Unido planea adquirir cazabombarderos nucleares en EE
UU.: nuevos detalles sobre la modernización militar El Reino Unido está intensificando sus esfuerzos para fortalecer su capacidad de defensa mediante la adquisición de aviones militares modernos estadounidenses, capaces no solo de realizar tareas de aviación convencional, sino también de portar armas nucleares tácticas. Según información de la prestigiosa publicación británica The Sunday Times, el gobierno del Reino Unido mantiene negociaciones tensas con el Pentágono para la compra de cazabombarderos F-35A Lightning, que tienen la capacidad de lanzar bombas nucleares gravitacionales, específicamente del tipo B61. Según fuentes en los niveles superiores de la administración militar británica, el ministro de Defensa, Jeremy Hunt, y el jefe del Estado Mayor de Reino Unido, el almirante Sir Tony Radakin, están trabajando activamente en este asunto en estrecha colaboración con sus colegas estadounidenses. Se espera que estos aviones formen parte de las fuerzas nucleares estratégicas británicas, junto a los submarinos de tipo Vanguard, que actualmente desempeñan el papel principal en la disuasión nuclear. De acuerdo a informes citados de fuentes en el gobierno y en círculos de defensa británicos, la atención principal actualmente está centrada en la modificación del F-35A Lightning de Lockheed Martin. Estos cazabombarderos tienen un alcance de vuelo de hasta 1,400 kilómetros, lo que supera significativamente las características de otras versiones del F-35, y son capaces de portar armas nucleares tácticas. En particular, se menciona la posibilidad de usar la bomba termonuclear gravitacional B61, que, según analistas, sería utilizada en el marco de la disuasión nuclear de la OTAN. Según documentos que se espera que sean presentados el lunes en el marco de la revisión estratégica de defensa del Reino Unido, estas decisiones tienen un significado estratégico para garantizar la independencia en defensa del país. Se prevé que en el documento de 130 páginas se señale una amenaza "directa y urgente" por parte de Rusia, considerada una de las principales amenazas actuales para la seguridad del pueblo británico y de toda la alianza. Se plantea que el nuevo paquete de armamento y rearmamento, considerando las nuevas tecnologías, permitirá a Gran Bretaña consolidar su posición como uno de los países capaces de mantener un sistema de disuasión nuclear efectivo sin depender completamente de las fuerzas armadas tradicionales. La información sobre estas negociaciones y planes estratégicos genera un serio interés internacional y resistencia por parte de países que llaman a la moderación en cuestiones nucleares. Mientras tanto, en resumen, se puede destacar que Londres ha dado un paso más hacia la modernización de su doctrina militar, buscando integrar tecnologías americanas modernas y garantizar su independencia en seguridad frente a la creciente tensión internacional. Esta decisión refuerza la tendencia hacia una readecuación activa de las capacidades militares, que, según expertos militares, debería fortalecer la posición del Reino Unido en el sistema global de seguridad internacional y crear mecanismos adicionales de disuasión contra posibles agresores.