La diputada de la fracción política «Servidor del Pueblo» Anna Kolisnik ha tomado la decisión de presentar su renuncia a sus poderes como parlamentaria debido a nuevas circunstancias y a la cercanía al final de su mandato en el Verkhovna Rada
Esto representa una conclusión lógica a una situación compleja que se ha desarrollado en torno a ella en los últimos meses y ha sido apoyada por unanimidad por el Comité de Reglamentos del Verkhovna Rada de Ucrania. De acuerdo con la información recibida del comité, este apoyó por unanimidad la declaración de la parlamentaria, tras lo cual la cuestión de su posible continuidad en el parlamento fue incluida en el orden del día de la sesión plenaria. En breve, esta resolución podría ser revisada en una sesión plenario, y entonces Kolisnik oficialmente finalizará sus funciones como diputada. Cabe señalar que este paso es lógico y justificado dada la serie de escándalos criminales y políticos que han provocado una crítica severa y un revuelo en torno a su nombre en los últimos meses. En primer lugar, se trata de los informes del Bureau Nacional Anticorrupción de Ucrania y de la Fiscalía Especializada Anticorrupción, que confirmaron que Kolisnik recibió una sospecha por aportar información falsa en su declaración electrónica de bienes por un monto superior a 4,4 millones de hryvnias. Esto generó una fuerte preocupación en la pública y en los círculos políticos respecto a una posible implicación de la diputada en acciones corruptas. Además, en los medios y redes sociales comenzaron a publicarse conversaciones filtradas, que provocaron una ola de críticas y fueron interpretadas como evidencia de vínculos y presiones por parte de representantes de esta circunscripción política. Asimismo, se conoció un episodio ocurrido antes del inicio de la invasión a gran escala de Rusia en Ucrania, cuando por medio de mensajes confidenciales surgieron confesiones sobre el deseo de la exdiputada de "huir de este país", lo que subrayó aún más su crisis política y moral. Desde el comienzo de la guerra y hasta la fecha, Kolisnik no ha asistido a ninguna sesión en el Verkhovna Rada. Según datos del Central Electoral Commission, ella no participó en reuniones desde el 12 de marzo de 2025 y, según las previsiones, tras la votación de los parlamentarios sobre su renuncia, perderá oficialmente su mandato. En caso de que los diputados aprueben la salida de Kolisnik, su lugar en el parlamento podría ser ocupado por uno de los candidatos de la lista del grupo parlamentario "Servidor del Pueblo". Sin embargo, cabe señalar que en la lista de los próximos candidatos se encuentran Dmytro Slynyk y Roman Kravets. Este último ganó popularidad por su actividad en el canal de Telegram "Joker" y es conocido por el público en general como administrador de dicha plataforma. De acuerdo con datos de la Comisión Electoral Central, la situación en la lista se complica aún más debido a que algunos candidatos, como Yulia Poliichuk y Volodymyr Trigub, quienes prometieron estar en la lista de reserva o aspirar a este puesto, renunciaron oficialmente a la posibilidad de ocupar un escaño en el Verkhovna Rada. De esta manera, el escenario de crisis política que se desarrolla en torno a Anna Kolisnik tiene un cierre lógico, que podría derivar en cambios sustanciales en la composición del Verkhovna Rada. Se espera que en los próximos días el parlamento tome una decisión definitiva sobre su futuro, y la situación política en torno a la diputada se aclare por completo. Esto será otro recordatorio de los desafíos que enfrenta la clase política ucraniana en su lucha contra la corrupción y en la garantía de la transparencia en la actividad parlamentaria ante los difíciles desafíos internos y externos que atraviesa el país.