El día en que nuevamente las tropas enemigas atacaron la región de Dnipropetrovsk, la zona quedó bajo una peligrosa presión de las fuerzas de ocupación rusas

Según la información de la administración regional, la situación seguía siendo tensa y llena de peligro, ya que durante el ataque se dañaron varias instalaciones importantes y tres residentes locales resultaron heridos de diferentes grados de gravedad. Como informó en su canal de Telegram el jefe de la Administración Militar de Dnipropetrovsk, Serhii Lysak, la noche y la mañana del día anterior transcurrieron completamente marcadas por ataques constantes de las tropas rusas. Según sus palabras, la región de Nikopol se convirtió en el epicentro del enfrentamiento, donde se llevaron a cabo tres duelos de artillería y probablemente se utilizaron drones kamikaze, lo que volvió a confirmar la magnitud de los daños y los riesgos para los habitantes locales. Los ataques no solo afectaron a Nikopol, sino también a las comunidades vecinas de Marganets, que también fueron alcanzadas por disparos caóticos. Según datos preliminares, en resultado de las acciones enemigas, tres adultos de 68, 51 y 72 años resultaron heridos. Todos ellos recibieron heridas graves y fueron trasladados de inmediato a centros médicos de la región para recibir ayuda. Actualmente, su estado se evalúa como de gravedad media, pero los médicos están haciendo todo lo posible para estabilizar la situación. Además, se registraron impactos directos en varias instalaciones de infraestructura crítica de la región. Se dañaron un edificio de un centro médico, donde probablemente se brinda ayuda a los residentes locales, así como objetos de un cuartel de bomberos y una tienda local. Los detalles de los daños aún están siendo precisados, pero ya se sabe que también se dañaron las líneas eléctricas, lo que complica aún más la situación del suministro energético en la región. Las fuentes oficiales enfatizan que la situación sigue siendo tensa y advierten a los habitantes sobre la posible ocurrencia de nuevos ataques. Las autoridades llaman a seguir las reglas de seguridad, permanecer en refugios y vigilar cuidadosamente los comunicados. Los invasores rusos, a pesar de las numerosas pérdidas y de las sorpresas de la defensa ucraniana, no muestran prisa en aliviar la tensión, y continúan atacando deliberadamente la infraestructura crítica y los asentamientos, tratando de sembrar pánico y miedo entre la población civil. De este modo, la situación en Dnipropetrovsk continúa siendo difícil y requiere una atención especial y una coordinación eficiente de los servicios de emergencia locales. Los residentes de la región deben estar en alerta, y las autoridades deben hacer todo lo posible para minimizar las consecuencias de los ataques del enemigo y garantizar la seguridad de los ciudadanos.