Aquí tienes la traducción al español del texto:
--- La noche del 2 de junio, el sistema de defensa de Ucrania volvió a enfrentarse a un ataque masivo por parte de las fuerzas rusas, las cuales utilizaron drones y armas balísticas de alta precisión. Según informes del mando de las Fuerzas Aéreas de las Fuerzas armadas de Ucrania, hacia el borde de la noche el enemigo atacó 80 objetivos aéreos, entre los cuales se encontraban drones falsos y otros imitadores, además de varios ataques con misiles. En total, los rusos activaron 80 drones de ataque del tipo Shahed y otros modelos de vehículos aéreos no tripulados (VAN), así como tres misiles balísticos del tipo Iskander-M o KN-23, y un misil de crucero Iskander-K. Los principales blancos de estos ataques fueron localidades en las regiones de Kharkiv, Chernihiv, Donetsk y Jersón, lo que confirma la escala y la orientación intencionada de esta agresión. Hasta las 8 de la mañana, los militares ucranianos lograron neutralizar 52 medios de ataque aéreo gracias a la defensa antiaérea. De ellos, 15 eran drones del tipo Shahed y sus imitadores, que intentaban penetrar en el espacio aéreo. También se registró que otros 37 blancos, principalmente misiles y sistemas de drones, fueron neutralizados o puestos bajo control mediante medios de guerra radioelectrónica, lo cual evidencia un alto nivel de profesionalismo y coordinación en la defensa aérea ucraniana. Los datos detallados sobre los daños indican que al menos 12 objetivos en distintas regiones de Ucrania sufrieron destrucción o daños. Se registraron impactos en instalaciones de infraestructura crítica y en áreas residenciales, reiterando la orientación deliberada de la aviación y los vehículos no tripulados rusos. Por su parte, las fuerzas ucranianas utilizaron todos los recursos posibles de apoyo aéreo y terrestre —incluyendo sistemas de misiles antiaéreos, unidades de guerra radioelectrónica y grupos móviles de fuego—. Gracias a estas acciones conjuntas, no solo lograron interceptar la mayor parte de los objetivos enemigos, sino también minimizar los daños y las pérdidas civiles. En general, el ataque nocturno confirmó una vez más la alta actividad y precisión con que las fuerzas rusas emplean tecnologías avanzadas para impactar las posiciones ucranianas. Ucrania continúa fortaleciendo su defensa antiaérea para hacer frente a estos desafíos y proteger su territorio y población de las consecuencias devastadoras de la agresión.