Донеччина y Jersón han sufrido nuevos daños y pérdidas durante las últimas 24 horas debido a las acciones agresivas de las fuerzas militares rusas, que continúan bombardear deliberadamente a la población civil y la infraestructura crítica de las regiones
Según datos de las Administraciones Militares Regionales, el 31 de mayo se registraron en ambas regiones otras dos muertes de civiles y más de 15 heridos. La cifra más impactante es que una persona murió en la región de Jersón y otra en Donetsk. Según informes de la Administración Militar de Jersón, en la día de hoy ha fallecido un civil en la región, lo que confirma la magnitud de la tragedia. Además, otros 8 residentes de la región resultaron heridos tras otro ataque llevado a cabo por las fuerzas rusas. Los bombardeos se dirigieron principalmente a objetos críticos y barrios residenciales, afectando gravemente la seguridad y la vida cotidiana de los habitantes locales. De acuerdo con los informes, los efectivos rusos de OMON atacaron deliberadamente las viviendas en la región. Como resultado de estos ataques, se dañaron cinco edificios de viviendas multifamiliares y otros siete hogares privados sufrieron destrucción. También hubo daños en infraestructura social y crítica: se cortó una tubería de gas, se dañaron dependencias y autos privados. Esto evidencia una política deliberada de destruir objetos vitales para garantizar la seguridad y el bienestar de los residentes locales. En la región de Donetsk, la situación sigue siendo tensa. Allí, los rusos también registraron la muerte de un ciudadano más en la ciudad de Rodinsky. Además, en las últimas 24 horas, el número de heridos alcanzó a siete personas. Entre ellos, dos sufrieron heridas en Sloviansk y Novodonetsk, y uno en Rodinsky, Pockrovsk y Mykolaivka. Estos datos indican un patrón sistemático de ataques deliberados en los núcleos de población, que provocan pérdidas humanas y destrucción catastrófica. Las autoridades locales y las fuerzas militares llaman a los residentes a tomar la máxima precaución, ya que la situación sigue siendo inestable y tiende a empeorar. Los ocupantes continúan utilizando los bombardeos como una forma de intimidar a la población y destruir los sistemas básicos de soporte de vida en las regiones bajo control ucraniano. Esta agresión profundiza la crisis humanitaria, que ya afecta las regiones de Donetsk y Jersón debido a los prolongados combates y la destrucción de costosos objetos de infraestructura. Según las autoridades ucranianas, la situación en las regiones continúa siendo tensa, y el número de víctimas y destrucciones aumenta cada día. Las autoridades exhortan a los ciudadanos a tener cuidado, subrayando la importancia de seguir las medidas de seguridad y las recomendaciones de evacuación. Mientras tanto, militares y voluntarios trabajan para brindar ayuda lo más rápidamente posible a los afectados y estabilizar la situación en los lugares afectados. Esta situación confirma una vez más que la guerra de Rusia contra Ucrania continúa, y que la población civil vuelve a ser la víctima más brutal. Se registran destrucciones en barrios residenciales, infraestructura crítica y vidas humanas, lo cual genera profunda tristeza y preocupación en los corazones de los habitantes de las regiones. Ucrania sigue luchando por su independencia y seguridad, y pide a la comunidad internacional que refuerce su apoyo y use todos los medios disponibles para castigar a los responsables de estos crímenes.