Aquí tienes la traducción al español del texto que proporcionaste:

--- Durante la noche del 30 al 31 de mayo, en la ciudad de Izyum, en la región de Járkov, ocurrió un nuevo episodio significativo de la agresión rusa, dirigida contra la población civil y la infraestructura civil. Según Oleg Sinegubov, jefe de la Administración Militar Regional de Járkov, los drones enemigos volvieron a atacar la ciudad, realizando golpes contra una empresa civil. Según funcionarios especializados, el incidente ocurrió en horas nocturnas, cuando los residentes de Izyum ya dormían o estaban en medio de una tensa espera por nuevas acciones militares. De acuerdo con información preliminar de fuentes oficiales, en particular de las palabras de Sinegubov, durante el ataque hubo una explosión en el territorio de una empresa civil que, a pesar de su actividad empresarial, se convirtió en víctima de los golpes rusos. "Izyum ha vuelto a ser bombardeado por drones enemigos. En la ciudad nuevamente sonaron fuertes explosiones," señaló el líder regional. Esto confirma una vez más la sistematicidad y el cinismo de la agresión por parte de las fuerzas rusas, que ignoran por completo las normas internacionales y los estándares éticos en la conducción de la guerra, dirigiendo sus ataques contra objetos civiles. Aunque todavía se están esclareciendo la magnitud de los daños y el número de posibles afectados, los datos preliminares indican que el golpe fue bastante potente y no solo afectó a la infraestructura, sino que también pudo haber provocado pánico entre los habitantes locales. La situación sigue siendo tensa, ya que estos ataques solo aumentan los riesgos para los civiles y crean una amenaza adicional a la seguridad del funcionamiento de la ciudad. Esta es otra ilustración de lo difícil que es la vida en las regiones cercanas a la línea del frente en Ucrania, en particular en la región de Járkov, que lleva mucho tiempo bajo una presencia invisible y presión diaria por parte de las fuerzas de ocupación. Las autoridades locales continúan exhortando a los residentes a ser lo más cautelosos posible, mantener la calma y seguir todas las reglas de seguridad necesarias en tiempos de alarma. Por el momento, no se han recibido informes oficiales sobre el número de víctimas o heridos como resultado de este ataque, pero una cosa está clara: las fuerzas rusas vuelven a demostrar su brutalidad, cinismo y negativa a seguir principios humanitarios en sus planes de destruir la infraestructura ucraniana y la población civil. Las autoridades ucranianas y las estructuras de defensa continúan trabajando para eliminar las consecuencias de este incidente y fortalecer el potencial de defensa de la región. Esta es otra oportunidad para recordar una vez más a la comunidad mundial la necesidad de intensificar la presión internacional sobre Rusia para detener la agresión y garantizar la seguridad de los ciudadanos ucranianos. La fidelidad a los valores de paz y dignidad humana sigue siendo la prioridad principal para los ucranianos en esta lucha por la independencia y la integridad del país.