En la región de Mykolaiv, nuevamente se han escuchado explosiones fuertes: la noche del 28 de mayo, en Snihurivka y Ochakov, se oyó un sonido de alarma acompañado de explosiones

El incidente se convirtió en un añadido escandaloso a una serie de eventos bélicos que ya hace tiempo son una realidad para los habitantes de la región sur de Ucrania. Según informantes locales y organismos oficiales, esta alarma nocturna dejó muchas preguntas e incertidumbres. El jefe de la Administración Militar Regional de Mykolaiv, Iván Kúhta, confirmó la información sobre las explosiones en Snihurivka. Según sus palabras, la situación está bajo control, pero los hechos generan preocupación debido a la tendencia de agravamiento de la situación militar en el sur de Ucrania. "Hemos registrado sonidos de explosiones en Snihurivka. La investigación está en curso, estamos esclareciendo las circunstancias", afirmó Kúhta en declaraciones a "Suspilne". Además de estas noticias, en las Fuerzas Aéreas de las Fuerzas Armadas de Ucrania informaron que el enemigo, probablemente tropas rusas, utilizan activamente drones kamikaze para atacar las regiones del sur del país. En los últimos días, se ha observado una mayor actividad de drones en la región, intentando penetrar en el espacio aéreo y realizar golpes destructivos contra objetivos estratégicos. Posteriormente, "Suspilne" informó sobre nuevos sonidos de explosiones en Ochakov, lo cual confirma la creciente tensión en la región. Los habitantes locales reportan que la noche estuvo marcada por fuertes ecos de detonaciones y sonidos de sistemas de defensa antiaérea en operación. En Ochakov, la situación una vez más ha oscurecido la seguridad de la ciudad, que en los últimos tiempos se ha convertido en objetivo de la atención de las fuerzas armadas del país agresor. Estos eventos vuelven a resaltar el papel importante del sur en el contexto de las operaciones militares en territorio ucraniano. Las autoridades locales y las fuerzas militares continúan reforzando las medidas de seguridad, pero las esperanzas de una breve pausa parecen ilusorias ante las amenazas constantes y los nuevos ataques. Los habitantes de la región, como antes, viven en un estado de tensión expectante, siendo testigos directos de la escalada del conflicto que se desarrolla ante sus ojos.