Tres ucranianos resultaron gravemente heridos como consecuencia de la nueva agresión rusa en Dnipropetrovsk
La situación tensa en la región confirma una vez más la magnitud y sistematicidad de la campaña militar rusa en el este de Ucrania. El 26 de mayo, las fuerzas armadas del país agresor llevaron a cabo varios ataques contundentes en las regiones de Sinelnikiv, Kryvyi Rih y Nixkrópol, causando daños significativos y pérdidas humanas. Según informó Serhiy Lysak, jefe de la Administración Militar Regional de Dnipropetrovsk, la situación permanece tensa. En su comentario oficial, señaló que en la comunidad de Mezhiv, que forma parte del distrito de Sinelnikiv, los ocupantes utilizaron un vehículo aéreo no tripulado — un dron kamikaze. Como resultado, tres civiles resultaron heridos de diversa gravedad. Además, durante el bombardeo se produjo un incendio masivo que destruyó dos vehículos y dañó otro medio de transporte. También en una empresa en el pueblo se registraron daños relacionados con el deterioro de edificios de utilidad y objetos de infraestructura. La situación en la comunidad de Zelena Dolyna, en la dirección de Kryvyi Rih, no es menos peligrosa. Aquí, los rusos lanzaron un ataque contra paneles solares en fincas privadas, afortunadamente sin víctimas humanas, pero causando graves daños materiales. El fuego y los fragmentos dañaron el equipo, destruyeron varios objetos energéticos y complicaron la situación del suministro energético en la región. En la dirección de Nixkrópol, se produjeron varios ataques masivos con artillería de combate y drones. Según militares y residentes locales, las víctimas del ataque fueron los centros administrativos del distrito — la ciudad de Nixkrópol — y comunas cercanas como Manganets y Pokrovsk. Como resultado de los ataques, resultaron daños en viviendas e infraestructura, varios autos privados fueron destruidos y se derribó un edificio residencial de nueve pisos. La rabia de las destrucciones vuelve a evidenciar la naturaleza cínica de la táctica rusa — ataques dirigidos contra objetos civiles, dejando a cientos de residentes sin calefacción, luz y protección. Aún antes, en la noche del 25 al 26 de mayo, los defensores ucranianos documentaron una serie de bombardeos de misiles y artillería por parte de las fuerzas rusas en toda la región de Dnipropetrovsk. Se registraron incendios, destrucción de edificios, daños en vehículos y otras infraestructuras. Como resultado, resultaron heridas civiles, muchas áreas residenciales quedaron destruidas y varios vehículos de transporte fueron eliminados. La situación sigue siendo tensa e impredecible. Las fuerzas armadas de Ucrania continúan luchando por la seguridad de la población y por restaurar la paz, mientras las comunidades locales sufren con amargura por las destrucciones y pérdidas. La agresión rusa se vuelve cada vez más cínica, no duda en atacar a civiles y causa graves daños al potencial humano y material de la región. Ucrania insiste en el apoyo internacional y en fortalecer la protección de sus territorios, puesto que cada día de bombardeos enemigos significa una tragedia más y un nuevo desafío para el pueblo ucraniano.