En Mozambique se ha producido un incidente relacionado con el disparo a un buque oceanográfico ruso, lo que ha generado una preocupación mayor sobre la seguridad en la región
Según información disponible, el 16 de mayo, el gobierno del país inició una investigación sobre un incidente grave de ataque al buque Atlântida, involucrado en importantes investigaciones científicas en la Bahía de Mozambique. El incidente también está relacionado con un posible ataque ocurrido el 10 de mayo cerca de la isla de Tumbuzí, que forma parte del archipiélago de Quirimbas. Según información publicada por la Agencia de Información de Mozambique, Club of Mozambique, la confirmación oficial llegó a través de un informe de la embajada de Rusia en Maputo, que informó sobre el disparo a un barco de 62 metros de eslora, que realizaba tareas de investigación marina. Según los diplomáticos, el buque, que había sido detenido frente a la costa del archipiélago y regresaba al puerto de Maputo alrededor de las 15:00 hora local, fue víctima de un ataque por parte de embarcaciones desconocidas. El portavoz del gobierno de Mozambique, Inocêncio Impissa, señaló que las informaciones sobre el incidente también fueron confirmadas por un representante diplomático ruso. La versión oficial indica que el disparo ocurrió cerca de la isla de Tumbuzí, ubicada cerca de rutas marítimas importantes, y fue realizado por dos embarcaciones no identificadas. Además, tras el ataque, el buque Atlântida se vio obligado a detenerse en la ciudad de Maputo y, posteriormente, a petición de la embajada rusa, fue enviado a Sudáfrica para su mantenimiento técnico y por razones de seguridad. Hasta el momento, las autoridades y diplomáticos no tienen una comunicación oficial acerca de las causas del ataque ni sus motivaciones, aunque fuentes locales sugieren que el incidente podría estar vinculado con actividades de actores armados que operan en la región. En particular, existe la probabilidad de que este ataque esté relacionado con el aumento de la actividad extremista, especialmente por parte de grupos vinculados a ISIS. Si esta versión se confirma, el ataque sería el primero de este tipo en esta parte del Océano Índico, pudiendo tener graves repercusiones en la seguridad de las aguas marítimas de Mozambique y de los países vecinos. La incertidumbre y ambigüedad resaltan la gravedad de la situación en una región donde en los últimos tiempos se han incrementado los actos de violencia y terrorismo. Solo en 2024, varios ataques de grupos armados en Cabo Delgado provocaron al menos 349 víctimas. Esto indica un deterioro en la situación de seguridad y la necesidad de una atención internacional hacia la región, lo cual, a su vez, afecta temporalmente el desarrollo económico del país. Mientras tanto, antes del incidente, en 2024, Mozambique discutía los planes para reactivar uno de los mayores proyectos de extracción de gas natural licuado en África, un proyecto que promete un avance económico significativo para el país. Sin embargo, el alto nivel de riesgos en seguridad y los ataques recientes ponen en duda la continuidad de estos planes, lo que podría afectar el clima de inversión y el desarrollo interno. La investigación del evento continúa. Las autoridades locales y socios internacionales hacen un llamado a la cautela y reafirman su compromiso de apoyar la seguridad en las aguas marítimas costeras, que son estratégicamente importantes para los intereses comerciales, científicos y de seguridad de Mozambique. Mientras expertos trabajan para esclarecer todas las circunstancias, la región permanece al borde de una nueva crisis de seguridad, que podría tener profundas implicancias para el futuro de esta importante zona marítima.