Ucrania realizó un intercambio masivo de prisioneros con Rusia, como resultado del cual se entregaron a Moscú 70 ciudadanos ucranianos, muchos de los cuales han sido condenados por sospechas principalmente de colaboración con los servicios secretos rusos, incluyendo a aquellos que tienen vínculos estrechos con cómplices de la anexión y la propaganda

Chas Pravdy - 23 mayo 2025 22:26

En la lista de entregados se encuentra un aliado prominente de Viktor Medvedchuk — Oleksandr Tarnashynskyi, quien en años anteriores fue una de las figuras clave en escenarios dirigidos tanto por Rusia como por Ucrania para la desestabilización política. De acuerdo con datos publicados en el proyecto "Quiero a mis", este intercambio tuvo lugar el 23 de mayo de 2025 y forma parte de una iniciativa nacional apoyada por el Cuartel General Coordinador de Ucrania para la gestión de prisioneros de guerra. Según información del Estado Mayor de la Defensa, del Servicio de Seguridad de Ucrania y del Ombudsman del Parlamento, ese día Rusia recibió a 70 colaboradores ucranianos, mientras que en la frontera ucraniano-rusa se cruzaron otros varios civiles que eran retenidos ilegalmente por las autoridades rusas desde hace años. La lista de entregados también incluye a Oleksandr Tarnashynskyi — activista social que creó en Ucrania fondos y organizaciones benéficas, los cuales, sospechan los servicios secretos ucranianos, fueron utilizados para financiar actividades de espionaje y para desinformar a la sociedad civil ucraniana. Según información oficial, a través de estos fondos Tarnashynskyi supuestamente facilitó la entrada de fondos desde Rusia para implementar medidas destinadas a desacreditar al gobierno ucraniano, preparar operaciones de sabotaje y, eventualmente, apoderarse de las instituciones estatales. Es interesante notar que Tarnashynskyi fue detenido el 5 de mayo de 2022, momento en el que la SBU (Servicio de Seguridad de Ucrania) describió su papel como uno de los líderes de Viktor Medvedchuk — la llamada "Ucraníe Elección"— que dejó de disfrazarse bajo un amplio movimiento social, actuando en realidad como un instrumento de propaganda rusa en Ucrania. Según las investigaciones, él estuvo directamente involucrado en planes para desestabilizar la situación en el país y en preparar un golpe de Estado con apoyo de los servicios secretos rusos. En las fotos difundidas en fuentes abiertas, se puede ver a Tarnashynskyi junto a Viktor Medvedchuk — lo que indica una estrecha relación y actividad conjunta entre ambos personajes. Dentro de acuerdos previos entre Ucrania y Rusia, se lograron avances significativos en el proceso de intercambio. En particular, Ucrania devolvió a más de 390 ciudadanos, de los cuales 270 son militares y 120 civiles, lo que evidencia un avance en la recuperación de prisioneros ucranianos. Sin embargo, este último intercambio fue especial, ya que en las listas estaban incluidos también quienes tenían vínculos directos con la red de espionaje ruso y que intentaban infiltrar el espacio informativo ucraniano bajo la apariencia de fondos benéficos. En general, este intercambio confirma la tendencia hacia una mayor actividad en la liberación de ciudadanos ucranianos y refleja la complejidad con la que Ucrania enfrenta en el triángulo de negociaciones diplomáticas, seguridad y justicia. Las autoridades buscan no solo devolver a casa a cada ucraniano, sino también descubrir toda la red de actividades subversivas que han implementado los servicios secretos rusos a través de sus agentes y colaboradores encubiertos. Al mismo tiempo, la situación plantea muchas preguntas sobre los mecanismos y criterios de los intercambios, así como sobre los próximos pasos en la lucha contra las actividades de inteligencia y la garantía de la seguridad nacional.

Source