Las fuerzas rusas han vuelto a elevar al máximo la horrible ola de bombardeos en Kharkiv, realizando ataques dirigidos contra Kupiansk y sus alrededores, incluyendo la aldea de Kupiansk-Vuzlovyi

Según informes de los servicios de rescate y las fuerzas del orden, los ataques fueron muy cínicos y destructivos: se usaron bombas aéreas dirigidas y sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes, lo que causó consecuencias trágicas para los habitantes locales. El 21 de mayo, los ocupantes rusos llevaron a cabo una serie de golpes específicos contra barrios residenciales enteros, con la intención de causar el máximo daño y fomentar el pánico entre la población. Según datos preliminares, en estos ataques murió al menos una persona y otras siete resultaron heridas de diversa gravedad. Los servicios humanitarios, las fuerzas del orden y los bomberos trabajaron en condiciones críticamente tensas, intentando eliminar las consecuencias de los daños y brindar ayuda a los afectados. En particular, en la aldea de Kupiansk-Vuzlovyi, los ocupantes emplearon una bomba aérea dirigida que impactó en un edificio residencial de tres plantas. Como resultado, uno de los accesos quedó completamente destruido, y los edificios multifamiliares y casas privadas cercanas sufrieron daños considerables. Según la información del Servicio Estatal de Emergencias, en esta ataques murió una persona y otras cuatro resultaron heridas. Fotos del lugar muestran la magnitud de los daños: muros con agujeros, balcones derruidos, comunicaciones rotas. No fue menos trágica la situación en la propia ciudad de Kupiansk, donde los impactos de varios proyectiles provocaron incendios en viviendas, instalaciones agrícolas, garajes y almacenes de madera. Según información preliminar, al menos tres mujeres de 72, 69 y 55 años resultaron afectadas por el fuego, sufriendo quemaduras y heridas, y fueron hospitalizadas de inmediato en centros médicos cercanos. Para la liquidación de las consecuencias de los bombardeos, se movilizaron tres unidades del Servicio Estatal de Emergencias y brigadas médicas móviles. Los bomberos trabajaron con la amenaza de nuevos ataques, poniendo en riesgo su propia seguridad, para ayudar a los afectados y estabilizar la situación. Junto con las fuerzas del orden, en el lugar trabajaron investigadores y criminalistas de la policía, que documentan la escala de los daños, recopilan evidencia y establecen todas las circunstancias de la agresión criminal. Esta mañana ha vuelto a demostrar que los civiles de Kharkiv viven en una amenaza constante, y el asedio a su región continúa de manera despiadada y cínica. El ejército de ocupación parece buscar deliberadamente destruir barrios residenciales, arruinar infraestructura y aumentar el miedo entre la población civil. La administración militar de la región de Kharkiv, junto con los servicios de rescate y la policía, llaman a los habitantes a no caer en pánico, ser cautelosos y seguir estrictamente las instrucciones de seguridad. Según el jefe de la Administración Militar Regional de Kharkiv, Oleksiy Sinegubov, la situación sigue siendo tensa, y los eventos en Kupiansk nos recuerdan una vez más el precio que se paga por la libertad y la independencia de Ucrania. La guerra continúa, y cada nuevo bombardeo enfatiza la necesidad de apoyar y luchar por una vida pacífica y segura en la región.