Los ocupantes rusos llevaron a cabo un ataque inesperado y cínico con un dron contra civiles en Sumy, lo que provocó las heridas de dos personas durante la distribución de ayuda humanitaria
El incidente ocurrió el sábado 20 de mayo, alrededor de las 11 de la mañana, cuando cerca del pueblo de Velyka Pysarivka, en el distrito de Okhtyrka, se habían reunido residentes locales para recibir productos vitales de manos de voluntarios y autoridades. Sin embargo, en lugar de un procedimiento pacífico, su risa o conversaciones fueron interrumpidas por un ataque repentino de un dron, que apuntó deliberadamente a la multitud de personas. Según la información oficial de la fiscalía de Sumy, publicada en el canal de Telegram de la institución, posteriormente se confirmó que durante el ataque resultaron heridas dos personas del lugar. La más afectada fue una mujer de 57 años, que fue trasladada rápidamente a un centro médico. Su estado actual se está precisando, pero se sabe que sufrió heridas graves y necesita atención médica y evaluación. Otro participante del incidente, un hombre de 51 años, recibió lesiones más leves y recibió atención médica en el lugar. Este ataque ha sido uno de los últimos ejemplos de agresión por parte de las fuerzas rusas en Sumy, que desde el inicio de la fase activa de la guerra ha sido escenario de golpes cínicos y sabotajes en varias ocasiones. Las autoridades locales y las fuerzas del orden ya han iniciado una investigación del incidente, abriendo un proceso penal bajo un artículo que prevé responsabilidad por atacar a la población civil, violar las reglas de la guerra o emplear medios y métodos prohibidos. Es importante destacar que tales acciones violan conscientemente todas las normas del derecho internacional humanitario y ponen en peligro la vida y la salud de ciudadanos comunes, que solo buscan recibir ayuda para sobrevivir en condiciones difíciles. Las circunstancias del ataque están siendo esclarecidas, y se han llevado a cabo acciones de investigación y entrevistas a testigos. Los residentes locales están asustados y enojados por esta agresión, que viola su derecho a recibir ayuda humanitaria de manera segura. Al mismo tiempo, la comunidad llama a reforzar la protección de los puntos de ayuda humanitaria y a aumentar la seguridad para las organizaciones voluntarias y los civiles que permanecen en la región. Las autoridades prometen hacer todo lo posible para detener tales delitos y llevar a los responsables ante la justicia de acuerdo con la legislación vigente en Ucrania y las normas internacionales.