En el Reino Unido se llevó a cabo el segundo arresto en relación con los incendios provocados que están estrechamente vinculados con la actividad de la primera ministra del país, Kira Starmer, lo que ha suscitado un amplio debate social y policial
Según informaron la policía local, el sábado 26 de mayo fue detenido en Londres un hombre de 26 años bajo sospecha de haber cometido un delito relacionado con una serie de incendios en propiedades que pertenecen o están asociadas con el primer ministro inglés. Este es ya el segundo sospechoso involucrado en el caso en los últimos días, lo que subraya la seriedad de la investigación y su repercusión política. De acuerdo con la información proporcionada por la policía local, el hombre fue detenido en el aeropuerto de Luton, en las afueras de Londres, cuando intentaba abandonar el país. Según los primeros datos, el sospechoso está acusado de conspiración para provocar un incendio con la intención de dañar vidas humanas y, probablemente, involucrado en varios incidentes ocurridos durante la última semana. Específicamente, se trata de incendios en propiedades y equipos relacionados con el nombre del primer ministro. La detención de este hombre ocurrió al día siguiente de que las autoridades arrestaran a un ciudadano ucraniano, Roman Lavrintovich, de 21 años. Este ucraniano fue presentado ante el tribunal de Westminster acusado de tres episodios de incendio que tuvieron lugar la semana pasada. Según la información disponible, los investigadores le leyeron cargos por la intención de crear una amenaza para la vida de las personas a través de una serie de fuegos en propiedades que, por todos los indicios, están vinculadas con el jefe del gobierno británico. Entre los incidentes que llevaron al arresto de Lavrintovich se encuentra un incendio en la zona de Kentish Town, en el norte de Londres, por lo que esa área, elegida por el primer ministro Starmer, está actualmente bajo una atención especial por parte de las fuerzas policiales. Según los investigadores, el fuego dañó las entradas de varios edificios, pero afortunadamente no hubo heridos. Sin embargo, este incendio representó un «punto final» en una serie de acontecimientos tensos, ya que los incidentes también incluyen ataques con vehículos y ataques a propiedades privadas. Anteriormente, la policía informó sobre un incendio en un vehículo Toyota RAV4 en la zona de Kentish Town y un incendio cerca de la entrada de un edificio de apartamentos en Islington, vecino a la zona. Todos estos incidentes ocurrieron en diferentes momentos y están vinculados con personas que tienen una relación directa o indirecta con el nombre de Kira Starmer. Debido a la alta posición pública y oficial del primer ministro, la investigación está siendo dirigida por la unidad antiterrorista de la policía británica, lo que resalta la gravedad y el posible móvil político de los delitos. Recordemos que otro ucraniano, Roman Lavrintovich, está siendo juzgado por incendios en varias otras propiedades, incluyendo aquellas relacionadas con los líderes políticos del Reino Unido. Este caso ha generado un amplio resquemor en la sociedad, considerando sus implicaciones políticas y de seguridad. Por su parte, el primer ministro Starmer comentó que los incendios en objetos relacionados con él representan «un ataque a nuestra democracia y a los valores que defendemos y respetamos». Estas declaraciones llaman a la unión de la sociedad británica en medio de un aumento de la tensión y muestran la seriedad con la que las autoridades abordan esta situación. La investigación de estos delitos continúa, mientras la policía y los servicios secretos trabajan para prevenir futuros actos de violencia. Al mismo tiempo, la ciudadanía y las élites políticas llaman a unir esfuerzos para garantizar la seguridad y estabilidad del país, ya que estos incendios no solo causan daños materiales, sino que también generan una atmósfera de miedo y desconfianza. El hecho de que en el centro de atención esté la figura del primer ministro añade tensión política y traslada este asunto desde una investigación penal a una cuestión de seguridad nacional y estabilidad del Estado.