La administración de Donald Trump se prepara para cambios a gran escala en la estructura de bienes raíces federales de EE
UU. Según información de Bloomberg, el equipo gubernamental que dirige el país desde el 45º presidente planea poner a la venta uno de los edificios clave en Washington: la histórica sede de "Voz de América". Esta decisión ha generado un amplio eco y ha cuestionado el destino futuro de este reconocido servicio de idiomas y de información internacional de Estados Unidos. Según fuentes del medio, esta nueva iniciativa es parte de un programa amplio para reducir los bienes inmuebles federales, que prevé la venta rápida de una serie de propiedades que no son estratégicamente importantes para las funciones del Estado. Uno de estos proyectos "relevantes" es el histórico edificio Wilbur Cohen Federal Building, situado cerca del Capitolio y del National Mall. Este no solo es un espacio administrativo, sino también un símbolo de la historia estadounidense, en el que actualmente se encuentran varias estructuras clave: la sede de "Voz de América", la Agencia de Medios Mundiales de EE.UU. (USAGM, por sus siglas en inglés), que es la organización matriz de todos los servicios de idiomas internacionales del país, incluyendo la famosa "Voz de América", así como el Departamento de Salud y Servicios Humanos. El plan de venta de este edificio surgió en medio de esfuerzos intensos de la administración vigente para eliminar o reducir significativamente la financiación de plataformas informativas estadounidenses, incluyendo "Voz de América", "Radio Free Europe", "Radio Free Asia" y otras estructuras relacionadas. Tales acciones han generado críticas tanto en círculos políticos como entre defensores de la libertad de prensa, ya que cuestionan la capacidad de EE.UU. para mantener una difusión de sus ideales de calidad en el mundo y asegurar la independencia de los medios internacionales. Según informes, esta iniciativa forma parte de un plan más amplio, ideado por un asesor del multimillonario y empresario Elon Musk, que busca reducir la cantidad de propiedades federales, lo cual, según muchos expertos, podría afectar negativamente el funcionamiento y el potencial humano de "Voz de América". En caso de venta del edificio histórico, los empleados y contratistas que actualmente operan en condiciones difíciles podrían enfrentarse a una intervención directa en su trabajo e incluso a un riesgo sin precedentes de perder sus empleos. Incluso si logran revertir en tribunales o en el Congreso cualquier decisión de recorte presupuestario, la decisión de la administración ya puede tener un impacto serio en sus actividades y en la conservación de la institución "Voz de América" en el futuro. Este paso genera muchas preguntas sobre los objetivos estratégicos de la administración de Trump en medio de sus decisiones políticas y su influencia en la política informativa global de EE.UU. Una de las principales es si realmente la venta de este edificio histórico ayudará a reducir la deuda pública, o si por el contrario será una nueva manifestación de un manejo negligente de las instituciones de medios masivos estadounidenses, fundamentales para sostener la política interna y exterior del país. Actualmente, la cuestión sobre el futuro de "Voz de América" y su autonomía física e informativa permanece abierta, mientras que los expertos advierten que este tipo de medida podría tener consecuencias de largo alcance para la percepción de EE.UU. en el mundo y para la difusión de sus posiciones en el espacio informativo global.