El 16 de mayo por la mañana, la capital de Ucrania, Kiev, volvió a verse sumida en un estado de tensión debido a sonidos repentinos de explosiones y a la activación del sistema de defensa aérea
Según la información de la Administración Militar de la Ciudad de Kiev, en ese momento en la ciudad se declaró una alarma aérea con el fin de alertar a los residentes sobre posibles peligros relacionados con una nueva amenaza militar. Según datos de la administración militar, la situación en Kiev era bastante tensa. A primera hora, a las 6:28 de la mañana, se declaró alarma por una posible infiltración de vehículos aéreos no tripulados —los llamados drones de ataque, que los agresores rusos utilizan para atacar infraestructuras críticas y zonas residenciales de la ciudad. Debido a informaciones sobre una mayor actividad en el cielo de Kiev, las fuerzas de defensa aérea fueron movilizadas rápidamente para neutralizar la posible amenaza. El alcalde de la capital, Vitali Klitschko, declaró en su informe oficial: «Las fuerzas de defensa aérea trabajan para eliminar la amenaza en el cielo sobre Kiev». Sus palabras destacaban que la ciudad se encuentra en un estado de alta preparación y que está respondiendo activamente a los ataques de drones. En ese momento, según testigos, se oían fuertes explosiones y sonidos específicos de las actividades del sistema de defensa aérea, que intentaba interceptar los objetivos en el cielo. «Explosiones en la capital. Las fuerzas de defensa aérea están operando contra los UAV hostiles», fue la breve declaración de Vitali Klitschko a las 6:38 de la mañana. En ese momento, en la ciudad comenzó una intensa labor de los sistemas de defensa aérea, lo que indicaba una amenaza real para la población y la infraestructura urbana. Los servicios de emergencia y las fuerzas militares informaron que las tropas de defensa aérea estaban trabajando para destruir los drones enemigos que intentaban infiltrarse en el espacio aéreo de la ciudad de manera deliberada. Posteriormente, la situación en la ciudad se estabilizó. En Kiev, después de un breve período de tensión, se declaró la *fin de la alarma* —el sistema de defensa aérea cumplió su misión, alcanzando y abatiendo a la mayoría de los objetivos hostiles. Los residentes que en ese momento estaban en refugios o en sus trabajos pudieron retomar su ritmo habitual de vida, aunque permanecen en alerta y preparados para posibles futuras repeticiones de los ataques. Este ataque nocturno confirma que los terroristas rusos emplean tecnologías y tácticas modernas para atemorizar y desestabilizar la vida del pueblo ucraniano. Kiev ha sufrido múltiples golpes en el marco de esta guerra, pero las fuerzas de defensa ucranianas demuestran una vez más su capacidad para responder rápidamente y reducir el nivel de amenaza para la ciudad. Se advierte a todos los habitantes de Kiev que permanezcan atentos, que sigan las recomendaciones de seguridad y que tengan presente que la seguridad y la integridad de nuestra ciudad dependen de la coordinación de las fuerzas de defensa y del compromiso de cada residente.