El Secretario de Estado de EE
UU., Marco Rubio, ha mantenido una serie de importantes llamadas telefónicas con colegas europeos y el ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania en busca de caminos para alcanzar la paz en Ucrania. Estas conversaciones diplomáticas han sido un paso adicional en los esfuerzos internacionales para reducir la tensión y encontrar una solución a la crisis que lleva más de un año. Según la información publicada en el sitio web oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores de los Estados Unidos, Rubio discutió con el ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Andrii Sybiga, la situación en Ucrania, así como con la alta representante de la Unión Europea, Kaja Kallas. Evaluaron posibles vías para lograr una solución pacífica del conflicto, incluyendo el cese del fuego y la paz a largo plazo. A la conversación también se unieron ministros de Asuntos Exteriores de países como Francia, Alemania, Polonia y el Reino Unido. En particular, Rubio dialogó con Jean-Noël Barro, Johannes Wadeful, Radosław Sikorski y David Lemmi. Es importante destacar que todos los participantes en estas negociaciones compartían el objetivo común de encontrar una solución para el conflicto ucraniano, que ya causa sufrimiento humano y destrucción durante más de un año. En el momento de estos contactos diplomáticos, Marco Rubio se encontraba en Arabia Saudita, específicamente en Riad. Cabe señalar que acompañaba al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en su viaje oficial por los países del Golfo Pérsico, que transcurre del 11 al 14 de mayo y abarca Arabia Saudita y Catar. Esta visita tiene una importancia estratégica para Washington, especialmente en el contexto de la seguridad regional y el apoyo a alianzas interestatales. Después de su estadía en Arabia Saudita, Rubio tiene previsto partir hacia Turquía, donde por segunda vez este año se realizará una reunión informal de ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN. Está programada del 14 al 16 de mayo en la ciudad de Antalya. El principal tema de discusión será el fortalecimiento de las prioridades de seguridad de la Alianza, en particular, el incremento de las inversiones en el potencial de defensa de sus países, así como la búsqueda de caminos para acelerar el proceso para poner fin a la guerra ruso-ucraniana, que ya se ha convertido en una de las crisis más graves de la actualidad. El largo camino hacia la búsqueda de una solución pacífica continúa, y los esfuerzos diplomáticos conjuntos son la mayor esperanza para el pueblo ucraniano. La comunidad internacional insiste en la necesidad de volver al diálogo y la diplomacia para detener el derramamiento de sangre y brindar a Ucrania la oportunidad de reconstruir su futuro en un mundo de paz y estabilidad.