¿Amenaza o táctica de contención?
Las fuerzas armadas ucranianas cumplen la orden de responder al enemigo en cualquier momento. Según informaciones de fuentes ucranianas, la situación en el frente continúa siendo tensa, aunque con algunas tendencias significativas hacia una disminución de la actividad de las tropas ocupantes. Siguiendo la tradicional noticia negativa, la mayoría de las unidades que operan en diferentes direcciones estratégicas — en Jersón, Zaporiyia y Donbas — confirmaron que se les ha dado una orden clara de abrir fuego en respuesta a cualquier acción agresiva del enemigo. Esto significa que incluso en casos de alto el fuego o de breve descanso, los militares permanecen listos para cualquier escenario, pero mantienen la moderación y no realizan acciones ofensivas activas. Según la información proporcionada por fuentes en el frente, incluyendo representantes de brigadas ucranianas, la actividad de artillería ha cambiado sustancialmente. En efecto, se observa una tendencia a reducir la intensidad de los bombardeos por parte de los ocupantes rusos. Así, en las regiones de Jarkov, Donetsk y Zaporiyia se registran menos ataques enemigos, se usan tipos de armas menos activas y la frecuencia de lanzamiento de drones y explosiones de artillería ha disminuido. Esto sin duda puede interpretarse como uno de los signos de la llamada “tregua”, que los rusos anunciaron unilateralmente desde el comienzo del 8 de mayo. Al mismo tiempo, las fuerzas ucranianas advierten que esta calma es temporal y más bien táctica que estratégica. De acuerdo con los informes operativos, los drones rusos, principalmente de tipo "FPV", se usan para reconocimiento y ajuste de fuego. Por ejemplo, algunas unidades en Jersón informaron que, desde que empezó la tregua, no han registrado ataques directos de artillería, pero en el cielo hay mayor actividad de drones rusos. Tomando el ejemplo del sector de Jersón, se informa que una brigada que defiende esa zona nota la ausencia de ataques activos, pero realiza observaciones diarias de vuelos de drones y reacciona conforme a las órdenes recibidas. Según los militares, tienen instrucciones de abrir fuego solo en respuesta, y no han recibido órdenes de comenzar a disparar primero. Esta táctica, explican, añade un nivel adicional de contención y evita provocar una escalada. En otros sectores, como en Pokrovsk y en Zaporiyia, la situación sigue una dinámica similar. Los militares en esas zonas confirman que desde la medianoche del 8 de mayo se aplican medidas para evitar violaciones del régimen de silencio. En el sector de Pokrovsk, se registraron más de diez incidentes, incluyendo bombardeos de artillería y lanzamientos de drones — todos en respuesta a acciones del enemigo y en cumplimiento de órdenes de mando. En las posiciones de Zaporiyia, también la situación está regulada. Los militares recibieron instrucciones claras de abrir fuego en respuesta si el enemigo se acerca a menos de 400 metros; en estos casos, se realizan disparos de advertencia y, si no se detienen, las metas son destruídas. Esto corresponde a una táctica de contención y protección de sus posiciones, ya que el enemigo aprovecha activamente la tregua para rearmarse, mover equipamiento y preparar nuevos ataques. En general, se confirma que las tropas rusas utilizan al máximo el breve período de “tregua” para reorganizarse y realizar reconocimiento en primera línea. Emplean drones para observación y ajuste de fuego, y no dejan de usar artillería, incluso cuando oficialmente se ha declarado un cese de hostilidades de tres días. Los militares de las Fuerzas Armadas de Ucrania enfatizan que las órdenes permanecen sin cambios: en caso de cualquier violación del régimen de silencio, responder, manteniendo calma y contención. Esto es necesario para evitar una escalada y mantener la situación bajo control mientras dure el “altavoz” de tres días, declarado unilateralmente por los rusos. Por otro lado, se sabe que Rusia ha intensificado los ataques con aviones tácticos y los drones enemigos siguen volando en el cielo, creando tensión y preocupación entre las fuerzas ucranianas y la población civil. La Fiscalía regional de Jarkov reportó víctimas por un ataque ruso: una persona murió y otras tres mujeres resultaron heridas, siendo una de las muchas víctimas de esta guerra. Asimismo, en la región de Sumy, en la noche del 8 de mayo, se registraron ataques con misiles que dejaron una persona fallecida y otras dos heridas. En conclusión, mientras el modo de “tregua encubierta” mantiene un período de pausa, las fuerzas ucranianas permanecen alertas y cumplen con sus obligaciones según las órdenes. Se trata de una táctica de paciencia y contención que debe ser la base para la futura victoria ucraniana y evitar una escalada del conflicto.