En la región de Odesa, el número de víctimas de un ataque nocturno con drones rusos ha aumentado significativamente y, según los últimos datos, ya son 15 personas afectadas

La tragedia ocurrió el 1 de mayo en la ciudad de Odesa, cuando un grupo hostil de drones llevó a cabo un ataque masivo contra la zona portuaria marítima ucraniana. Según información oficial, se dañaron edificios residenciales, comercios, vehículos de transporte y objetos sociales; todo ello fue víctima del ataque enemigo. Según datos del Servicio Estatal de Emergencias (SEDE), como resultado del ataque fallecieron dos civiles, y otras 15 personas resultaron heridas de diversa gravedad. También se reportan daños importantes: edificios de apartamentos, viviendas privadas, un supermercado, una escuela y varios automóviles. Los lugares donde impactaron los drones están cubiertos por incendios, y los servicios de emergencia respondieron rápidamente a las llamadas, apagando los incendios con prontitud, informó un representante del SEDE en su canal de Telegram. En los sitios afectados se realizó una evacuación masiva: en uno de los edificios de viviendas se evacuó a más de 200 personas la víspera para evitar su participación en diversas situaciones peligrosas. Además, los bomberos instalaron un puesto de ayuda para brindar asistencia y apoyo a los residentes afectados o sin hogar debido a las explosiones. La historia previa indica que la noche del 30 de abril al 1 de mayo fue otro episodio de ataques de Rusia en Odesa y sus alrededores con drones de alta precisión. Como resultado de un ataque anterior, según las autoridades locales, perdieron la vida trágicamente dos personas, y otras cinco resultaron heridas. La policía local y los servicios de seguridad aseguran que siguen buscando a una pareja de ancianos desaparecida, ya que estaban entre las víctimas y aún dependen de la búsqueda. Los objetos del sector residencial, la infraestructura social y los vehículos de transporte han sufrido daños sustanciales, dificultando la vida de miles de habitantes de la ciudad. Este no es el primer caso de ataques masivos en la región, y la situación sigue siendo tensa, pues los defensores ucranianos están decididos a repeler nuevos ataques y a restaurar urgentemente los objetos dañados. Odesa se ha convertido tradicionalmente en blanco de ataques rusos con drones, y cada incidente confirma una vez más el alto nivel de peligro que pesa sobre la ciudad. Las autoridades locales piden a los ciudadanos que permanezcan en seguridad y sigan las comunicaciones oficiales, mientras los servicios de emergencia trabajan las 24 horas para eliminar las secuelas del ataque nocturno y garantizar la seguridad de la población local.