Donald Trump describió su reciente reunión con Volodymyr Zelensky en el Vaticano como un «momento de consuelo» en un tiempo difícil para Ucrania
La visita a la Basílica de San Pedro, que tuvo lugar el 26 de abril, representó una etapa importante en los diálogos diplomáticos entre Estados Unidos y las autoridades ucranianas, y las palabras del ex-presidente de EE. UU., pronunciadas durante una entrevista con ABC News, adquirieron un amplio eco en el espacio informativo. Según Trump, durante la reunión expresó su preocupación por la crisis sin precedentes a nivel humano y humanitario que se desarrolla debido a la guerra entre Rusia y Ucrania. Comentó que en la conversación con Zelensky se abordó la grave y muy complicada situación actual en Ucrania y en sus alrededores. "No es mi guerra", subrayó, "pero quiero ayudar a resolverla, ya que cada semana mueren aproximadamente 5000 jóvenes militares de ambos lados: rusos y ucranianos". Para Trump, esto significa que el conflicto tiene graves consecuencias humanas y humanitarias que no deben ignorarse. El presidente de EE. UU. también destacó el aspecto financiero de la ayuda a Ucrania y el papel de Europa en su apoyo. "Estamos gastando sumas enormes en esta guerra, y Europa debe esforzarse mucho más y contribuir con fondos, porque sin su participación es difícil imaginar una pronta solución al conflicto", afirmó Trump. Agregó que en este momento no solo se trata de ayuda militar, sino también de esfuerzos de mediación y resolución diplomática. Respecto a la atmósfera de la reunión en el Vaticano, el ex-presidente estadounidense la calificó como "en cierto sentido, un momento de consuelo", haciendo hincapié en la cantidad de víctimas que continúa creciendo: "Mucha gente está muriendo, y eso me entristece mucho. La guerra se lleva vidas civiles, militares, y destruye los destinos de cientos de miles de personas. Y estoy realmente preocupado por esto". Añadió que "la lógica de las conversaciones estuvo centrada en la compasión y en buscar formas de reducir las pérdidas humanas, así como en el camino hacia la paz". Anteriormente, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, en su interacción con los periodistas, destacó que su reunión con Trump tiene potencial para convertirse en una «histórica». Enfatizó la importancia de continuar la labor diplomática, así como que el procedimiento de dicha reunión y su tono pueden jugar un papel clave en la formación de apoyo internacional y en la comprensión de la situación en Ucrania. Desde la Casa Blanca, por su parte, valoraron la reunión positivamente. Se mencionó que la conversación fue «muy productiva» y que el debate se centró en la necesidad de fortalecer la cooperación y el apoyo a Ucrania en este momento difícil para ella. Los medios de comunicación están difundiendo activamente los detalles de este encuentro diplomático, resaltando la importancia de sus resultados tanto para una futura resolución del conflicto como para un diálogo internacional sostenido sobre la situación en Ucrania. De este modo, la visita y reunión en el Vaticano no solo constituyeron un paso diplomático en el contexto del conflicto global, sino que también simbolizaron la humanidad, la compasión y el deseo de encontrar caminos hacia la paz, que comienzan con la conversación.