El jefe del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania, Andriy Sybiga, hizo un enérgico llamado a observadores y analistas internacionales para que se abstengan de difundir afirmaciones infundadas sobre la victoria de Rusia en la guerra, destacando que las circunstancias reales en el frente distan mucho de tales evaluaciones
Según él, la tendencia entre expertos extranjeros a subestimar las capacidades militares de Ucrania y sobreestimar las fuerzas rusas crea una ilusión de una supuesta victoria estratégica de Moscú, que presenta signos evidentes de conclusiones erróneas. El ministro enfatizó que esta visión es falsa y engaña a quienes buscan una evaluación objetiva de la situación. En un comentario publicado a través de la red social X (antes Twitter), Sybiga subrayó: «La suposición de que Rusia gana la guerra es un error. Se basa en la tendencia común entre analistas extranjeros a subestimar a Ucrania y sobreestimar a las fuerzas rusas. Este patrón ha sido demostrado muchas veces como incorrecto, pero aún así continúa engañando a las personas con ilusiones». El ministro señaló que la situación en el frente sigue siendo difícil y que las acciones del enemigo realmente superan a las fuerzas ucranianas. Sin embargo, es importante destacar que Rusia aún no ha logrado romper el frente ucraniano ni alcanzar un éxito estratégico, a pesar de las dificultades evidentes causadas por la ofensiva invernal. Andriy Sybiga afirmó que durante los últimos meses, las fuerzas rusas han sufrido pérdidas significativas en sus esfuerzos por romper las líneas defensivas, incluyendo en intentos de aplicar tácticas de ofensivas invernales, que hace tiempo han agotado su efectividad. La sede del mando ruso ha tenido que solicitar apoyo de las fuerzas de Corea del Norte para compensar sus pérdidas, mientras que las fuerzas ucranianas, por su parte, han optimizado su defensa y logrado repeler algunos pequeños avances territoriales, especialmente alrededor de las posiciones de Pokrovsk. Recordó que el Kremlin aspiraba a capturar toda el territorio de Ucrania en unos pocos meses, pero esto fue solo una ilusión. Para tomar completamente la región de Donetsk, Rusia necesitaría muchos años, considerando el ritmo de avance de las tropas enemigas. En un plazo más corto, ya llevan nueve meses de combates intensos desde el inicio de las operaciones en la región de Kursk, pero el avance de las tropas rusas está obstaculizado por la defensa ucraniana. El jefe de la MFA subrayó que el panorama global es completamente diferente. La invasión a gran escala de Rusia en 2022 se convirtió en una catástrofe enorme para Rusia. Inicialmente, Moscú esperaba una rápida «guerra relámpago» para destruir Ucrania de inmediato y cambiar rápidamente la situación en el frente, pero la realidad demostró ser muy distinta. Según cálculos, desde el comienzo de la guerra, Rusia ha perdido más de 950,000 soldados, entre muertos y heridos, y solo consiguió capturar Jersón en 2022, una posición que las fuerzas ucranianas han logrado recuperar con esfuerzos, además de restablecer el control sobre más de la mitad de las áreas ocupadas desde el inicio de la invasión. El ministro enfatizó que Ucrania, tras años de guerra, ha fortalecido significativamente su industria de defensa. En el país, la dependencia de armas importadas ha disminuido, ya que ahora produce por sí misma cerca del 40 % del armamento y equipo necesario. En particular, Ucrania ha desarrollado una sólida base industrial para la producción de drones no tripulados, de los cuales más del 95 % se emplean en el frente. Gracias a la aviación militar y los drones, las tropas ucranianas pueden destruir objetivos de forma eficaz, alcanzando casi dos tercios de todos los objetivos en el frente. Asimismo, el ministro mencionó que en marzo de 2025, los drones ucranianos identificaron más de 77,000 objetivos del ejército ruso, un 10 % más que en febrero. La constante expansión de las capacidades de los vehículos aéreos no tripulados permite fortalecer significativamente la defensa ucraniana. «Los drones se han convertido en una parte integrante de nuestro éxito. Garantizan el ataque preciso a los objetivos y fortalecen considerablemente nuestra línea de defensa. Es un ejemplo de nuestra capacidad para responder y actuar de manera autónoma en condiciones difíciles», afirmó Andriy Sybiga. El jefe del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania concluyó que los ucranianos desean la paz más que nadie en el mundo. Nunca quisimos esta guerra, y para lograr una paz duradera, es necesario utilizar todos los instrumentos diplomáticos posibles. «Lo que realmente necesitamos es una presión fuerte sobre el Kremlin y una evidente intensificación de nuestra defensa. Esto permitirá que Moscú comprenda que la situación ya no está bajo control y que la victoria de Rusia en esta guerra se ha vuelto irrealista», concluyó Sybiga. En medio de una tensión diplomática bastante elevada, durante el fin de semana pasado volvió a conmocionar al mundo un aviso del secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, quien delineó un período particularmente importante en la próxima semana en relación con el apoyo a Ucrania y las posibles decisiones sobre el futuro del conflicto. Según él, la situación sigue siendo tensa, y EE. UU. tiene muchas preguntas sobre si podrán mantener su curso estratégico para evitar una escalada en la guerra entre Rusia y Ucrania. Rubio resaltó que el presidente Donald Trump está considerando cuidadosamente las cuestiones relacionadas con las sanciones a Rusia, pero por el momento no tiene prisa en aplicar esa herramienta, dejándola como una opción para decisiones futuras en el marco de máxima responsabilidad.