Los ocupantes rusos han llevado a cabo otro ataque en Jersón: alrededor de las 10 de la mañana lanzaron un bombardeo en un barrio residencial de la ciudad usando dos bombas aéreas guiadas — llamadas KABs — que causaron daños extensos
Según la Administración Militar Regional de Jersón, como resultado de este ataque, las plantas superiores de varias viviendas en un complejo residencial de varios pisos quedaron gravemente dañadas: se derruyeron secciones completas de edificios, lo que provocó la destrucción de varias viviendas y puso en peligro a los habitantes. Testigos informan que el lugar de impacto estuvo demasiado cerca de muchos edificios residenciales, y los daños se concentraron en uno de los edificios de varias plantas. Fotos y vídeos del lugar confirman la gravedad de las consecuencias: las plantas superiores quedaron completamente destruidas. Como resultado del ataque, al menos cuatro personas resultaron heridas, dos de ellas requirieron hospitalización por sus lesiones. Otros residentes viven con miedo y en estado de shock, ya que los bombardeos se han vuelto una amenaza regular y muy real para ellos. Por suerte, en la respuesta coordinada de los rescatistas participaron equipos de ambulancias y bomberos. Inmediatamente comenzaron la evacuación de los habitantes, realizaron tareas de búsqueda y rescate entre los escombros y brindaron primeros auxilios a los heridos. Las personas que perdieron sus viviendas o sufrieron daños en sus casas lograron salvar la vida, aunque sus apartamentos quedaron irreconocibles. Según fuentes oficiales, varios centros sociales y educativos también resultaron afectados: guarderías, escuelas y centros médicos fueron destruidos o severamente dañados. Es otro golpe a la infraestructura civil de la ciudad y una prueba más de la táctica cínica de Rusia, que utiliza la aviación para aterrorizar y intimidar a la población civil. Los expertos explican que el uso de KABs es una táctica de intimidación destinada no solo a destruir zonas residenciales, sino también a aumentar el miedo y desestabilizar la situación en la región. Al mismo tiempo, las Fuerzas Armadas ucranianas y los servicios de rescate continúan trabajando en condiciones difíciles, tratando de minimizar las consecuencias de estos ataques. Los habitantes de Jersón, que a menudo quedan sin luz, agua y calor debido a los daños en la infraestructura, ya esperan con ansias que la situación se estabilice y que aumenten los esfuerzos internacionales para detener la agresión rusa. Las autoridades locales prometen tomar todas las medidas necesarias para restaurar la vivienda y garantizar la seguridad de los residentes, ya que cada día nuevos daños nos recuerdan el costo de esta guerra para las personas comunes. En este contexto, es importante entender que la situación en Jersón sigue siendo tensa, y las tropas de ocupación continúan con su juego cínico, en el que civiles son las víctimas. Las autoridades locales instan a los residentes a ser lo más cautelosos posible, evitar las zonas peligrosas y, por ahora, mantener la calma mientras continúan las investigaciones y las tareas de reparación y recuperación. Además, llaman a los ciudadanos a fortalecer la difusión de información para llamar la atención sobre esta catástrofe humanitaria y lograr una mayor ayuda internacional en la lucha contra el agresor.