Las pérdidas generales de las fuerzas militares rusas y norcoreanas en la dirección de Kursk han alcanzado a más de 67 mil, informa el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania
Desde el inicio de la operación en Kursk, que continúa desde el 6 de agosto de 2024, los defensores ucranianos han registrado pérdidas graves en la fuerza militar y recursos de personal del enemigo, al mismo tiempo que lograron victorias valiosas y devolvieron a cientos de compatriotas del cautiverio. Según datos oficiales, en la zona de combates en el frente de Kursk, los rusos perdieron más de 62 mil de sus militares. Estos números incluyen tanto pérdidas irreversibles —es decir, muertos que ya no pueden volver a la vida— como pérdidas sanitarias en forma de heridos. En particular, según información del Estado Mayor, desde el comienzo de la operación se han eliminado en total 25,2 mil personal militar, y el número de heridos ha alcanzado más de 36 mil. Además, en el frente, se tomaron como prisioneros a 983 militares del ejército ruso, y estos intercambios permitieron salvar la vida de cientos de nuestros defensores, quienes fueron evacuados del cautiverio ruso. Con respecto a las fuerzas de Corea del Norte, sus pérdidas en la dirección de Kursk, según estimaciones del ejército ucraniano, superan las 4,500 personas, incluyendo tanto muertos como heridos. Esto indica que el enemigo está sufriendo pérdidas destructivas en todos los frentes y tiene bajas significativas en su lucha contra los defensores ucranianos. El Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania subraya que las acciones militares en esta parte del frente continúan y que la situación sigue siendo tensa. La última vez, Putin informó que en la región de Kursk «se liberó el último asentamiento» —Gornál—, lo que sirvió de base para las declaraciones oficiales de propaganda del liderazgo ruso acerca de supuestas victorias y la finalización de las operaciones militares en la región. Sin embargo, las fuerzas ucranianas refutan estas afirmaciones, señalando que la información sobre la «eliminación de los últimos puntos de apoyo habitados» no corresponde a la realidad, y que el país agresor sigue sufriendo pérdidas significativas y luchando en todos los frentes. Antes fue así y ahora la situación continúa siendo difícil y tensa. La dirección militar de Ucrania enfatiza que la lucha sigue y que los defensores ucranianos no permiten ninguna pausa al enemigo, infligiéndole bajas severas y gradualmente recuperando el control de los territorios ocupados. Al mismo tiempo, las fuerzas ucranianas analizan la situación y continúan trabajando para fortalecer la defensa, aprovechando cada oportunidad para fortalecer sus posiciones y obtener nuevas ventajas tácticas importantes.