La utilización de drones invisibles procedentes de Rusia ha provocado una nueva ola de peligros para los civiles que habitan Donetsk
La mañana del 26 de abril, los ocupantes rusos llevaron a cabo un ataque directo cerca del municipio de Pokrovsk, más precisamente en la comunidad unida de Shakhivska, que forma parte del distrito de Pokrovsk. Según la información preliminar, la víctima fue un vehículo civil – una furgoneta que en ese momento circulaba por la carretera, ignorando el peligro. Según informó el servicio de prensa de la Fiscalía de la provincia de Donetsk, el ataque se realizó con un vehículo aéreo no tripulado (VANT) equipado para ataques en puntos específicos. Un dron enemigo FPV (utilizado para controlar el dron mediante una señal de vídeo en tránsito desde las cámaras) realizó un disparo vulnerable para los objetos civiles. Como resultado, varias personas que viajaban en la furgoneta resultaron heridas de gravedad de diversa índole. Las víctimas fueron rápidamente trasladadas a centros médicos. Según las evaluaciones médicas preliminares, a los heridos se les diagnosticaron lesiones por explosiones y minas, múltiples heridas por fragmentos, contusiones y quemaduras. Los especialistas están determinando la magnitud de los daños y haciendo todo lo posible para brindar la ayuda adecuada. Entre los heridos hay un menor, un joven de 16 años, cuyo estado se evalúa como grave pero estable. Este caso ilustra de manera tensa las consecuencias que puede tener el uso de tecnología armamentística moderna en tiempos de paz y en objetos civiles. Este no es el primer caso de uso de drones rusos en retaguardia de los territorios ucranianos, pero cada uno provoca una ola de indignación y descontento entre la población local. Lo que más enfurece es que la población civil se encuentra en zonas de combate sin una necesidad táctica clara, y que estos ataques encubiertos de un enemigo poderoso abren nuevos frentes de inseguridad y desafíos médicos para los servicios ucranianos. Los datos sobre el incidente han sido confirmados por la fiscalía, que subraya el peligro del uso de nuevas tecnologías en operaciones militares contra civiles. La oficina indica que se están tomando todas las medidas de seguridad y protección de la población, pero que el agresor continúa usando innovaciones técnicas para intimidar y eliminar a los habitantes pacíficos. Ucrania hace un llamado a la comunidad internacional para intensificar la presión sobre Rusia con el fin de detener los ataques dirigidos contra civiles y el uso de medios de guerra prohibidos, que violan el derecho internacional y las convenciones. Los eventos cerca de Pokrovsk vuelven a recordar la amenaza constante que se cierne sobre las ciudades pacíficas de Donetsk. La guerra continúa y cada nuevo incidente es una señal para que todos unan esfuerzos con el fin de lograr la paz y proteger a lo más valioso: las vidas de las personas comunes.