En Balakliya ocurrió una trágica tragedia tecnogénica: un automóvil atropelló una mina, cuyo resultado fue mortal para el conductor
El incidente se registró el 22 de abril en la ciudad de Balakliya, en el distrito de Izyum, en la región de Járkiv, que actualmente se encuentra bajo un alto nivel de riesgo debido a la proliferación de dispositivos explosivos improvisados en los territorios desocupados. Según la información oficial de la policía regional, este caso vuelve a recordar el peligro que aún persiste en las tierras liberadas de la ocupación. Como informan en el servicio de prensa de la Policía Nacional de Járkiv en su canal de Telegram, el suceso ocurrió en la ciudad de Balakliya en un día donde se realizaban trabajos activos de búsqueda y de recuperación. Según datos de las autoridades, alrededor del mediodía, el conductor circulaba por un camino forestal que atravesaba zonas civilizadas y, aparentemente, ya seguras de la ciudad. En ese momento, su vehículo inesperadamente atropelló un artefacto explosivo; preliminarmente se ha establecido que era una mina anticarro, escondida en el suelo. Como consecuencia de la trágica explosión, el hombre que conducía el vehículo murió en el lugar del incidente. Todos los intentos de salvar la situación o brindar ayuda fueron infructuosos. Se sabe que los esfuerzos de los rescatistas y las autoridades estuvieron dirigidos a esclarecer las circunstancias y garantizar la seguridad de las áreas circundantes, pero la víctima humana ya no pudo ser salvada. La policía señala que la situación con el peligro de minas sigue siendo extremadamente compleja y muy negativa debido a las acciones militares activas y sus consecuencias. Enfatizan que en las áreas liberadas, la presencia de dispositivos explosivos sigue siendo alta y la probabilidad de encontrar una mina es sumamente grande. Un portavoz oficial de la policía reiteró el llamado a los residentes y visitantes de la región para que tengan la máxima precaución. «No ingresen en bosques, cementerios ni en plantaciones — enfatizan en la policía. — No utilicen caminos y senderos desconocidos. Nunca se acerquen ni manipulen objetos sospechosos, ya que esto puede tener consecuencias trágicas. En caso de detectar algún objeto sospechoso o explosivo, llame inmediatamente a los números 101 o 102. Esto salvará vidas, no solo la suya, sino también la de quienes están a su alrededor». La muerte del conductor en Balakliya vuelve a subrayar la complejidad y el estado de peligro constante que enfrentan los habitantes de la ciudad y los trabajadores de los servicios especiales en la región, que ha sufrido numerosas destrucciones a causa de los combates. Las autoridades y las fuerzas del orden llaman a la prudencia y a la responsabilidad, ya que el peligro de minas sigue siendo uno de los problemas más urgentes y sin resolver en Járkiv tras la salida de la ocupación temporal.