El Vaticano ha anunciado oficialmente la fecha de la ceremonia de despedida del Papa Francisco, que será un acontecimiento importante para millones de fieles y la comunidad mundial
Según información recibida de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, los funerales del pontífice están previstos para el sábado 26 de abril. Este será un evento religioso y diplomático de gran relevancia, que reunirá en la Plaza de San Pedro a decenas de líderes mundiales y dignatarios de alto rango. Según los planes preliminares, la ceremonia comenzará a las 10 de la mañana, hora local, en la Plaza principal del Vaticano. Allí se celebrará una misa funeral presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, uno de los actores espirituales más respetados en el círculo de los colaboradores más cercanos del difunto Papa. Tras la conclusión de la liturgia, el ataúd con el cuerpo de Francisco será trasladado a la Basílica de San Pedro para una despedida adicional, y posteriormente, en vísperas del entierro, será llevado a la Basílica de Santa María Maggiore, donde será el último lugar de descanso del pontífice. Este anuncio oficial ha sido el término lógico de un largo período de espera y preparación para este acontecimiento histórico. Recordamos que el Papa Francisco, de 88 años, falleció el 21 de abril a las 7:35 de la mañana en su residencia en el Vaticano. Según la versión oficial, la causa de la muerte fue un ictus ocurrido días antes. Su fallecimiento constituyó un golpe fuerte para la Iglesia católica y la comunidad mundial, que recibió con profunda tristeza la pérdida de un líder espiritual talentoso. Inmediatamente después del anuncio del fallecimiento del pontífice, el mundo reaccionó con una serie de declaraciones y comunicados sobre participación en las ceremonias de despedida. Entre ellas, líderes de países como Estados Unidos y Ucrania expresaron su intención de acudir al Vaticano. El presidente de EE.UU., Donald Trump, señaló que su visita sería su primera visita oficial al extranjero en su segundo mandato presidencial, subrayando el carácter especial de este evento en el contexto internacional. También expresaron su posible participación el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, y representantes de otros países, ya que la muerte de Francisco no solo fue un acontecimiento religioso, sino también un evento diplomático de gran escala. Debido a la alta importancia del evento, en el Vaticano se han establecido ciertas restricciones: durante los preparativos para el funeral, estuvo prohibido el paso de cualquier aeronave sobre Roma para evitar incidentes imprevistos y garantizar la seguridad de los participantes y asistentes a la ceremonia. Esto refleja la magnitud y la relevancia del evento, que atrae la atención mundial y será una de las ceremonias principales en el ámbito religioso y diplomático internacional en este año.