En el corazón mismo de Odesa, en el distrito de Izmail, se desarrolla una historia trágica que ya ha llamado la atención de las autoridades y pone en duda la seguridad del entorno familiar para los menores habitantes de la región
Según la información confirmada por la policía de la región de Odesa, horas antes del incidente, médicos llegaron al lugar informando de la hospitalización de un niño de 5 años, que había recibido heridas en la mandíbula inferior y el cuello. Como se ha establecido, la tragedia ocurrió en un entorno doméstico, cuando la abuela del niño, de 50 años y residente de una de las localidades del distrito de Izmail, trató de esconder en casa una antigua afición — una carabina neumática que su propio esposo usaba anteriormente. Estas circunstancias fueron las que dieron origen a la investigación, que comenzó justo después del incidente. Según datos preliminares de los investigadores, la mujer disparó accidentalmente con ese arma, que alcanzó a su nieto, que se encontraba al lado. Como resultado del incidente, el niño sufrió heridas de gravedad o de gravedad moderada, lo que requirió atención médica inmediata. Actualmente, se encuentra en el hospital infantil regional de Odesa, donde su estado sigue bajo la supervisión constante de los médicos. Las autoridades ya han registrado el caso en el Registro Único de Investigaciones Preparatorias. Según la información oficial, se trata de un delito por lesiones corporales de grave o moderada gravedad por negligencia — un artículo que prevé sanción de hasta dos años de prisión. Dentro de las pesquisas, se están llevando a cabo varias experticias judiciales para determinar con la mayor precisión posible todas las circunstancias del trágico incidente y clarificar qué responsabilidades tienen los involucrados en la situación. El incidente conmueve por su vulnerabilidad y, al mismo tiempo, por la gravedad del problema de la responsabilidad en el almacenamiento de objetos peligrosos en el hogar, especialmente cuando hay niños cerca. Ahora, la tarea principal de las autoridades es establecer si este caso fue simplemente un accidente o si la responsabilidad por la seguridad en el hogar recae en algún adulto. Al mismo tiempo, la sociedad espera una investigación justa y objetiva de esta tragedia, para que en el futuro puedan evitarse casos similares y garantizar la seguridad de cada niño.