Durante el período del llamado «Cese al fuego de Pascua», las fuerzas rusas continuaron atacando Ucrania de manera dirigida y a gran escala, violando los acuerdos anunciados y contribuyendo a una mayor tensión en los frentes del país
Según datos del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania, solo en las últimas 24 horas, el agresor realizó casi 2,000 bombardeos y 96 enfrentamientos bélicos, demostrando su firmeza en el intento de romper la defensa ucraniana. El 20 de abril, los defensores ucranianos registraron una cantidad récord de ataques y bombardeos en diferentes direcciones. En particular, en la dirección Pokrovsk, el enemigo atacó más de 40 veces e llevó a cabo más de 1800 bombardeos, incluyendo 33 con sistemas de artillería de cohetes y utilizó 957 drones kamikaze no tripulados para afectar posiciones ucranianas y localidades. Esto indica un alto nivel de actividad del ejército ruso y sus ambiciones de mantener o incluso ampliar el control en las zonas ocupadas temporalmente. En Kharkiv, los ocupantes intentaron una penetración en la línea defensiva ucraniana cerca de Krasne Pershe, pero sin éxito. En el área de Kupyansk, ocurrió un enfrentamiento armado en la región de Holubivka, mientras que las situaciones más tensas permanecen en las direcciones de Liman y Siversk: el enemigo atacó 12 y 3 veces respectivamente, tratando de penetrar las defensas en las regiones de Nadiia, Myrne, Hrekiivka, Katerynivka, Novo y Yampolivka. Las batallas más intensas actualmente suceden en la región de Siversk, donde el enemigo realizó tres intentos de avance en las áreas de Bilohoriivka e Ivano-Dariivka, y en el este, en la dirección de Kramatorsk, donde las fuerzas rusas atacaron cinco veces en la zona de Chasiv Yar, así como en las direcciones de Stupochok y Bilyi Gory. Los esfuerzos de los ocupantes en la dirección de Toretsk fueron igualmente intensos: llevaron a cabo 10 ataques cerca de las localidades de Druzhba, Toretsk y Leonidivka. Una parte significativa de las fortificaciones ucranianas fue superada en la dirección de Pokrovsk, donde las tropas ucranianas lograron detener 39 intentos de asalto por parte de las fuerzas rusas, que intentaban romper las defensas en las áreas de Sukhі Balka, Myrolubivka, Yelyzavetivka, Lysivka, Kotlyne, Udyne, Novooleksandrivka, Uspenivka, Preobrazhenka, Andriivka y Rozlyv. Esto confirma una vez más la alta capacidad combativa y resistencia de las fuerzas ucranianas, que contrarrestan activamente al enemigo y le infligen pérdidas considerables. En las direcciones del sur — Novopavlivske y Orikhiv — los ocupantes realizaron varias ofensivas, pero sin éxito, sufriendo pérdidas en equipo y personal. En particular, en Novopavlivske, el enemigo intentó cinco veces un avance, y en Orikhiv, cuatro, pero los defensores ucranianos mantienen la línea y dificultan el avance del enemigo. En las direcciones de Huliajpol y Dnipro, no se registraron combates activos en las últimas 24 horas. Por otro lado, en las regiones de Volyn y Polissia, las fuerzas ucranianas no detectaron signos de formación de nuevos grupos ofensivos enemigos, lo que indica una relativa calma en estos frentes. En el sector de Kursk, a lo largo de la frontera de Rusia, en las últimas 24 horas se registraron 184 bombardeos de posiciones ucranianas, de los cuales 17 con sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple. A pesar de ello, las defensas ucranianas lograron repeler 16 ataques de asalto del enemigo, infligiéndole pérdidas significativas en personal y equipo. Manteniendo el control de la situación, las Fuerzas Armadas de Ucrania continúan destruyendo el potencial ofensivo del enemigo en el territorio trasero, atacando depósitos logísticos, cuarteles generales y eliminando municiones en reserva en las unidades enemigas. En general, la situación en el frente sigue siendo extremadamente tensa y compleja. Las fuerzas ucranianas demuestran una alta destreza y valentía en combate, a pesar de la presión constante y los bombardeos masivos por parte de Rusia. Al mismo tiempo, las pérdidas del enemigo, la destrucción de su equipo y su trabajo activo en retaguardia reducen significativamente su capacidad de combate, otorgando a Ucrania ciertas ventajas en esta lucha prolongada y agotadora por su independencia e integridad territorial.