Según una encuesta reciente de Gallup, el nivel de apoyo a las acciones de Donald Trump durante los primeros meses de su segundo mandato presidencial fue superior al de ese mismo período durante sus primeros cuatro años como jefe de la Casa Blanca

En particular, casi la mitad de los encuestados estadounidenses — un 45 % — expresaron su aprobación respecto a las acciones de Trump en el primer trimestre de su segundo mandato. Esto representa un aumento considerable en comparación con su primer período, cuando muchos expertos y líderes de la sociedad civil destacaban un nivel de apoyo bastante bajo. Si se analiza con mayor profundidad las estadísticas, se puede observar que en un cuarto de su primer mandato Trump tenía una tasa de aprobación solo del 41 %. Este indicador fue 19 puntos porcentuales menor que el promedio de apoyo en ese período para los presidentes estadounidenses de todos los tiempos, lo que revela los serios desafíos y crisis con los que enfrentó sus comienzos en la Casa Blanca. Es notable que desde 1952, cuando se comenzaron a realizar encuestas sistemáticas de opinión pública con respecto a los presidentes de EE. UU., el promedio de aprobación en los primeros meses de mandato rondaba el 60 %. La causa del aumento en la popularidad de Trump en los primeros meses de su segundo mandato se atribuye a su activa política en el ámbito exterior y económico, en particular, al anuncio de la imposición de nuevos aranceles. En este mes, el expresidente anunció la introducción de un arancel base del 10 % casi para toda la importación, además de elevar los tarifados para ciertos países, en especial para China, que sigue siendo el principal socio comercial de EE. UU. Según Trump, estas medidas buscan estimular la producción interna y crear una nueva ola económica en Estados Unidos. Actualmente, la mayoría de los aranceles "recíprocos" implementados se encuentran en un período de pausa de 90 días, aunque esta suspensión no afecta a China. Precisamente, Pekín sigue siendo el mayor socio comercial de EE. UU. y una prioridad central en la política comercial de la administración de Trump. La práctica extendida de introducir aranceles nacionales y restricciones comerciales genera opiniones encontradas tanto entre las empresas estadounidenses como entre la población, pero al mismo tiempo fortalece el apoyo mediante críticas a los procesos de globalización por parte de los oponentes. En general, el aumento en la aprobación de Trump durante este período puede reflejar una dinámica política interna, la concentración de su base electoral y su capacidad para usar temas de política exterior para movilizar apoyo. Sin embargo, los analistas señalan que estos altos niveles de apoyo aparecen en un momento en que los estadounidenses enfrentan las consecuencias de sus decisiones en política exterior y medidas económicas, lo que provoca numerosos debates sobre su eficacia y los efectos a largo plazo para el país. Además, hay que destacar que en este contexto de maniobras políticas y económicas, la figura de Trump gana una importancia cada vez mayor en la formación de la opinión pública y en el escenario político de EE. UU., y sus acciones ya han sido tema de acalorados debates en la sociedad, especialmente en relación con el apoyo y la oposición. En conjunto, el análisis de los datos recientes de encuestas muestra que las valoraciones presidenciales de Donald Trump permanecen muy variables y dependen de muchos factores internos y externos, pero actualmente su apoyo presenta una estabilidad que incluso podría incrementarse.