Amenaza en el Donbas: los ocupantes rusos refuerzan sus posiciones en Kalinove y se preparan para un ataque a gran escala en Kostiantynivka
En el este de Ucrania, en la provincia de Donetsk, la situación permanece tensa y dinámica. Según los últimos informes, las tropas de ocupación rusas intensifican sus esfuerzos para consolidar sus posiciones avanzadas en el asentamiento de Kalinove, que se encuentra cerca de la línea del frente. Esta zona estratégica se convierte en un centro de preparación para nuevas acciones militares, y los defensores ucranianos alertan sobre la posible realización de un ataque a gran escala en dirección a Stara Mykolaivka y la carretera que conduce a Kostiantynivka. Según la fuente informativa DeepState, las tropas rusas, que controlan Kalinove desde hace tiempo, están llevando a cabo trabajos activos para fortalecer sus posiciones. Están desplegando unidades adicionales de infantería en el lugar, organizando rutas logísticas para el suministro rápido de municiones, alimentos y recursos tecnológicos. También se están estableciendo canales de comunicación para ayudar a los ocupantes a coordinar sus acciones en condiciones de combate activo. Una atención especial la dedican a la preparación para un posible ataque en dirección a Stara Mykolaivka y la carretera que conecta esa zona con regiones más alejadas. Ya se han detectado concentraciones de equipos militares y vehículos blindados, lo que indica una pronta movilización de fuerzas en caso de escalada del conflicto. Otro factor importante en este conflicto es el uso de drones enemigos. Según los militares ucranianos que defienden esa sección del frente, los ocupantes rusos han intensificado el uso de drones de reconocimiento y de ataque. En la zona han llegado tripulaciones que previamente demostraron su capacidad de combate durante las hostilidades en Kursk, y ahora representan una amenaza significativa para las fuerzas ucranianas. Los defensores ucranianos informan que los “katsaps” (término despectivo para referirse a los rusos) están intentando destruir las cadenas logísticas del ejército ucraniano, tratando de “desechar” nuestro sistema de suministro y reducir nuestra movilidad. Además, señalan que los drones rusos ya vuelan con bastante calma hacia los alrededores de Kostiantynivka y otros objetos estratégicos, recopilando inteligencia y datos en tiempo real. Esto genera una tensión adicional y pone en peligro la seguridad de las unidades ucranianas que buscan contener los planes ofensivos del agresor. Sin embargo, el ejército ucraniano y las fuerzas de defensa continúan coordinar esfuerzos para contrarrestar este escenario amenazante. Los militares intensifican acciones de contraofensiva, establecen nuevas posiciones defensivas y realizan trabajos para fortalecer la protección. Al mismo tiempo, los expertos ucranianos enfatizan la importancia de reforzar el sistema de defensa aérea, ya que los drones y medios aéreos del enemigo siguen siendo una de las principales amenazas, incluso para posiciones mejor fortificadas. La situación mantiene abierta la cuestión del desarrollo futuro en este sector del frente, pero ya está claro que el enemigo se está preparando de manera consciente para una nueva etapa de operaciones militares, intentando destruir al máximo la defensa ucraniana y avanzar hacia adelante. Ucrania, por su parte, continúa defendiendo su territorio y está lista para responder adecuadamente a cualquier desafío por parte de las tropas de ocupación.